Los españoles ganamos a los británicos en idiomas

Aparte de las que ya se conocen, entre españoles e ingleses ha aparecido una nueva diferencia. Sus lenguas están entre las más habladas del mundo, en tercera y segunda posición respectivamente, pero mientras que en España el interés por estudiar un segundo idioma es creciente, en Reino Unido alarma la caída de la demanda de estudios de lenguas extranjeros.

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Sólo con inglés no les va a valer.

Hace tiempo que ser licenciado o incluso doctor no es un seguro para entrar en el mundo laboral. La competencia es tan grande que se necesitan otros requisitos que nos diferencien del resto. La informática es importante pero en un mundo globalizado lo es más el idioma y los españoles lo empezamos a saber. Aunque tardamos en concienciarnos de esta necesidad, en parte por el cierre de fronteras de la política franquista, en los últimos años se ha registrado un repunte de alumnos en las academias y escuelas de idiomas. Uno de los ejemplos más evidentes está en Castellón. En sólo seis años el alumnado de la Escuela Oficial de Idiomas de esta provincia aumentó un 47%. Y en Madrid, el curso pasado se matricularon 2.000 alumnos más que en el periodo 2004-2005.

Lo que pasa en Inglaterra es todo lo contrario. Según recoge el diario The Independent, en la última década los centros de idiomas han disminuido en casi una cuarta parte su alumnado, especialmente el de alemán. Desde 1998, el idioma germano ha perdido más de 1.500 alumnos y ha pasado de 2.288 en 1998 a 610 el curso pasado. Y mientras el alemán perdió más de un 26% de alumnos en la última década, los estudiantes de francés se redujeron en un 65%.

Con el inglés no basta

El auge de los idiomas en España ha sido pura necesidad, sobre todo en el caso del inglés. Del último estudio de la consultora Ipsos del mes de marzo se desprende que el 70% de los españoles reconoce que el inglés es importante o muy importante. Y así lo dice David Blundell del British Council. Según éste, los alumnos que se matriculan en el instituto saben que "el inglés más que un idioma es una herramienta para el futuro de los negocios". Una idea que comparten los propios británicos. De ahí el abandono progresivo de lenguas extranjeras.

La situación alarma en Reino Unido. El estudio de la Escuela de Estudios Orientales y Africanos (SOAS) advierte de que el inglés podría perder su posición como la lengua más hablada en el ámbito económico. De hecho el informe English Next refleja que la lengua británica sólo representa un 30% del producto interior bruto mundial y no descarta que el porcentaje se reduzca en un futuro por la presencia de idiomas como el español y el chino. Este último ya se ha convertido en la lengua más estudiada del planeta.

El nuevo rey del mambo

El cambio económico y la aparición de China como economía emergente ha sido el causante del aumento de matriculados en estudios de chino mandarín. En Inglaterra ha comido terreno a las lenguas más tradicionales y en España su estudio se ha unido al de otros idiomas, entre ellos también el árabe. Vidal Bou, director de la Escuela de Chino Vidal, explica que desde 2005 el número de matriculados "ha aumentado un 300%". "La mayor evolución la hemos vivido en los últimos tres años con la entrada de China en la Organización Mundial del Comercio (OMC). En este tiempo hemos pasado de tener 2.000 alumnos a más de 5.000", asegura.

La fiebre del chino se explica como una inversión de futuro. De hecho las dos terceras partes de matriculados en la academia de Vidal se han apuntado a clase "por temas comerciales y de negocios. Algo más de la mitad del alumnado está trabajando en China o van a trabajar allí y luego están los que quieren incorporar el idioma en el currículo porque eso les da una nota distintiva respecto al resto de los compañeros", dice. La otra tercera parte tienen el perfil de los alumnos de hace 10 años: "van desde los coleccionistas de idiomas a estudiantes de artes marciales".