José Manuel Calderón subraya que los estadounidenses "han tenido que dar cerca del 200% para ganar"

Pekín.-  El base extremeño de la selección española José Manuel Calderón, una ausencia muy destacada en la final olímpica frente a EEUU, ha señalado al final del partido que el "Dream Team" hubo de emplearse a fondo para doblegar a la correosa España.

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(EFE)

Los jugadores Felipe Reyes (i) y José Manuel Calderón besan las medallas de plata tras la final masculina de baloncesto olímpico que les enfrentó a Estados Unidos hoy, 24 de agosto de 2008, en el pabellón Wukesong en Pekín. España fue derrotada por 107-118.

"Ellos han tenido que dar más del cien por cien, cerca del 200 por cien porque si no, no ganan", dijo el jugador de los Raptors de Toronto y uno de los jugadores del equipo nacional más familiarizados con el juego estadounidense.

Calderón fue más allá y aseguró: "Hemos demostrado que somos mejores. Si el arbitraje hubiera sido con las reglas FIBA habríamos ganado", señaló en referencia a todas las infracciones de pasos que no señalaron los tres colegiados del partido.

"Se les ha visto un poco más nerviosos que en otros partidos, todo el que haya seguido un poco a este equipo lo ha podido ver, estaban todos de pie, hablando, un poquito nerviosos sí que han estado", dijo Calderón para explicar cómo España consiguió poner contra las cuerdas a los mejores jugadores del mundo.

"Estamos muy contentos pero un poco cabreados, nos hemos quedado a las puertas y cuando estábamos más cerca no ha podido ser", dijo acerca del ajustado final del choque.

"Hemos llegado a donde queríamos. Hemos perdido contra un equipo muy bueno. Creo que hemos dado la cara, todo el mundo lo ha visto y eso es lo importante", añadió.

Calderón, que tuvo que ver el partido desde el banquillo señaló que estuvo "ayudando a sus compañeros, gritando, apoyando. Y la verdad es que ha sido espectacular. Ha sido un mes muy especial. Jugar así contra el que todos decían que era el favorito y lograra una plata en unos JJOO es apasionante".

De algún modo, el jugador extremeño ocupó el rol que le tocó a Pau Gasol en la final del Mundial de Japón, que también se la perdió por lesión y que como Calderón recibió un homenaje de sus compañeros, que salieron al parqué con su camiseta.

"Ha sido un gesto muy bonito. Mi situación es diferente a la de Pau porque yo puedo estar saltando con mi equipación y estaré jugando en un par de días", dijo Calderón.

"Ha sido muy especial. Había hablado mucho con Pau, pensábamos que un lesionado nos podría dar buenas suerte como la otra vez y hemos llegado bastante lejos", añadió.