Baleares pide que se tenga en cuenta la insularidad y la población flotante

Zaragoza.-  El consejero de Salud y Consumo de Baleares, Vicenç Thomás, ha trasladado hoy a sus homólogos del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud la petición de que en la financiación de la sanidad se tengan en cuenta factores como la condición de insularidad o la población flotante.

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(EFE)

Vista de la sesión plenaria del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (SNS), formado por los consejeros responsables de salud de todas las comunidades autónomas, y presidido por el ministro de Sanidad, Bernat Soria.

Thomás, en el transcurso de la reunión del Consejo Interterritorial, que preside en Zaragoza el ministro de Sanidad, Bernat Soria, ha defendido las tres reivindicaciones de las Islas Baleares en el proceso para determinar la financiación sanitaria de las autonomías.

Así, ha pedido que haya un reconocimiento "real" de la financiación actual; que se tenga en cuenta la insularidad, "que comporta costes muy diferenciados respecto a otras autonomías, y que se incluya también en el cálculo la población flotante, ya no de turistas españoles, sino de extranjeros que están temporalmente en las Islas Baleares, adonde llegan doce millones de turistas anuales, que también deben tener garantizada la atención sanitaria.

Vicenç Thomás, quien considera que el documento "Argumentos y criterios que determinan las actuales necesidades financieras y de cohesión del Sistema Nacional de Salud" recoge elementos positivos, ha hecho hincapié en que es necesaria la suficiencia financiera "para mantener la sostenibilidad" del sistema, y por eso los consejeros de Economía que negociarán el nuevo modelo de financiación autonómica deben de conocer las necesidades de la Sanidad.

Baleares, ha agregado, "es la comunidad peor financiada por este aspecto en la ley de 2001", porque la Ley Orgánica de Financiación de las Comunidades Autónomas en vigor "no contemplaba elementos dinámicos" ni el aumento de población, que en Baleares ha sido del treinta por ciento en desde 1999.

Sobre el proyecto de Real Decreto de medidas para la intimidad en la prestación de la interrupción voluntaria del embarazo, el consejero balear ha puntualizado que intenta garantizar dos aspectos: la confidencialidad y la propia prestación del servicio.

Determinadas situaciones han implicado la existencia de cierta "inseguridad jurídica" tanto a las mujeres como a los profesionales médicos, y por eso Thomás comparte que hay que reforzar la seguridad jurídica, además de la intimidad.