Tu cara me suena

Los comienzos siempre son difíciles para todos los artistas. Nadie empieza sabiendo y son muchos los caminos que hay que tomar para llegar al éxito. La fama cuesta, decía la profesora de baile de la serie Fama.

Este verano veíamos el Hormigas blancas más aburrido y decepcionante de toda la historia del programa de tele 5, el dedicado a Mecano. Lo único destacable del especial era el rescate de la primera aparición de "José Mari Cano y amigos" interpretando "al alba" de Luis Eduardo Aute en el concurso de tve Gente Joven.

Jose Mari, su hermano y una empanada Ana Torroja, que mientras hace los coros parece que está pensando en la lista de la compra, no pasaron del séptimo puesto. Demasiado me parece a mí, con una interpretación aburrida, como de parroquia de barrio pijo y con una entonación forzada y ridícula. Sólo hay que ver los modelitos que nos llevan los muchachos y el repertorio escogido para ver que si poco más de un año después aparecían convertidos en la salvación del tecnopop español y vestidos de new romantics, el asunto Mecano era un grupo prefabricado donde ellos no opinaban nada.

Es cierto que la gente evoluciona y va cambiando. Todos tenemos fotos que esconder. Pero una evolución tan increíblemente acelerada como la de José Mari Cano y sus amigos en Mecano es muy difícil de creer si no hay un equipo detrás que te diga como tienes que vestirte y que discos escuchar.

El caso contrario es el de Cristina del Valle. Ahora mujer concienciada y luchadora de todo tipo de causas perdidas. Pocos podíamos pensar que la jovencita llamada Cris que irrumpió a mediados de los 80 en el panorama musical con sus tirabuzones, cancioncitas insulsas estilo Objetivo Birmania y apoyada por Juan de Pablos con idea de convertirse en la versión ibérica de la cantante francesa Lio, iba a terminar haciendo marchas protesta hasta Marruecos.

Claro que Cristina tuvo su etapa larga donde pudo evolucionar de muñeca objeto y cantante calientabraguetas con aspecto de infantil Lolita en su primera etapa en solitario o al comienzo de Amistades Peligrosas (¿recuerdan el antológico "voy a ir al grano y te voy a meter mano"? lo cantaba la misma que ahora lucha por la dignidad de la mujer) a convertirse en la militante por causas perdidas que es ahora. Una evolución totalmente digna y creíble, que para algo Cris nos cae muy bien y jamás pensaría que todo lo hace por salir en la foto. No, no, no.

Otras en cambio han tenido reconversiones regresivas. El sex symbol de la new wave Deborah Harry no siempre fue un mito erótico... ni rubia. A finales de los años 60 Debbie formaba parte de The Wind in the Willows, grupo que mezclaba armonías estilo Mamas and the Papas con la psicodelia de California. Mucho buen rollismo, drogas, paraísos artificiales y el deseo de la paz en el mundo para un grupo donde Deborah era la cantante con un estilo vocal completamente opuesto al que luego le haría triunfar con Blondie. En su disco homónimo editado en 1968 y que a mediados de los 90 fue reeditado en cd para horror de la ambición rubia, Deborah Harry ya demostraba lo artista tan completa que era encargándose de la voz y el difícil arte de la pandereta folk.

Cristina del Valle, antes de ser una luchadora de las causas perdidas

"Elvis should play ska" era una cancioncita veraniega y graciosa que llegó de Inglaterra de la mano de un grupo llamado Graduate. Pegadiza y al estilo de los skatalíticos ritmos imperantes en la época con grupos como Specials, sonó sin parar en emisoras de radio y discotecas. El grupo llegó a editar un lp y se separaron cuando tenían medio grabado el siguiente, cuyas canciones aparecieron como extras cuando el primer disco, "Acting my age", fue editado años despues en cd.

El éxito real para dos de los componentes de Graduate llegó poco despues al convertirse Roland Orzabal y Curt Smith, en el dúo Tears For Fears y abandonar los ritmos bailables por la imperante corriente oscura y atormentada que venía pegando fuerte en la escena musical inglesa.

Y es que la carrera musical es muy dura y son muchos los que comienzan desde abajo haciendo pequeñas cosas para meter la cabeza y luego poder ir subiendo y teniendo contactos. Que se lo digan a Carlos Segarra, cantante de los Rebeldes, y a Loquillo; que no les importó en absoluto aparecer de vez en cuando en programas musicales de televisión como extras acompañando en playback a sus ídolos musicales, como en el programa Aplauso, donde el rocker Robert Gordon solía aparecer con la banda de Loquillo como acompañamiento.

Muchos dicen que el paso por un concurso como Operación Triunfo puede ser un lastre para una futura carrera profesional y el ser tomado en serio. No a todos les ocurre lo mismo. De hecho, Mai Meneses fue una de las primeras expulsadas de su edición y nadie daba un duro por ella. Tiempo después, sorprendía a propios y extraños con el grupo Nena Daconte llegando a sonar incluso en el programa de Diego Manrique de Radio 3.

Nena Danconte están a punto de editar su segundo disco del que ya hay como adelanto el precioso "tenía tanto que darte", pero los de Nena Daconte no son los primeros discos editados por Mai Meneses. En 2004 publicaba el single "Mi amor" a dúo con la cantautora y jurado de OT Inma Serrano, que pasó totalmente desapercibido a pesar de los intentos de algunos programas del corazón en confundir realidad y ficción y buscar la noticia en un supuesto romance entre las dos cantantes que nunca fue tal.

*Alejandro Arteche es nuestro colaborador de música.