Mexicanos exigieron "ni perdón ni olvido" sobre la "Matanza de Tlatelolco"

México.-  Miles de personas recordaron hoy en Ciudad de México con marchas y actos solemnes la matanza perpetrada hace 40 años por militares para aplastar un movimiento estudiantil que reclamaba libertad al Gobierno, inspirado en la rebeldía juvenil internacional de 1968.

"Ni perdón ni olvido, a los culpables castigo", fue el lema de las distintas marchas, una de las cuales partió de la plaza de las Tres Culturas, en el barrio de Tlatelolco, donde hace cuatro décadas el Ejército disolvió una multitudinaria manifestación estudiantil con un saldo oficial de unos 40 muertos, pero que organizaciones civiles cifran en 400.

Las manifestaciones de hoy estuvieron encabezadas por varios de los sobrevivientes, como el escritor Carlos Monsiváis y el legislador Pablo Gómez, que hoy rebasan los 60 años, así como por jóvenes estudiantes de bachillerato y universitarios.

La "Matanza de Tlatelolco" es uno de los hechos contemporáneos más estudiados en México, pero que no ha sido esclarecido en su totalidad, pues aún se desconoce quién dio la orden de disparar contra la multitud, los motivos para reprimir violentamente el movimiento estudiantil a diez días de la inauguración en la capital mexicana de los XX Juegos Olímpicos y cuántas personas murieron.

El detonador del movimiento fue una represión en julio de 1968 de alumnos de bachillerato por la Agrupación de Granaderos y fue subiendo de tono al grado de que reunió a estudiantes universitarios para reclamar libertad en un año sacudido a nivel internacional por la Primavera de Praga, el mayo francés y las protestas en Estados Unidos contra la guerra en Vietnam.

En las marchas de hoy, vigiladas de cerca por unos 6.000 policías, se exigió castigo a Luis Echeverría, quien entonces era ministro del Interior y después presidente del país (1970-1976).

En 2006 fue acusado de genocidio por una Fiscalía especial creada para investigar el periodo de la "Guerra Sucia" (1960-1980), en un proceso que se ha alargado, pero que tiene bajo arresto domiciliario al ex mandatario octogenario, quien vive en el sur de Ciudad de México.

En una entrevista publicada recientemente, Echeverría dijo que no tenía por qué pedir perdón a nadie.

El legislador izquierdista Pablo Gómez, uno de los líderes en el movimiento estudiantil en ese año, dijo a Efe que el levantamiento de 1968 fue la primera batalla por la democracia política en México que ha tenido sus derrotas y victorias, pero que la mayor parte de sus demandas siguen vigentes.

"Una gran cantidad de demandas del movimiento estudiantil no se han cumplido. En el país sigue habiendo presos y desaparecidos políticos, la televisión permanece cerrada a la sociedad, no existe diálogo para resolver los problemas, no hay referendo ni revocación de mandato, la libertad sindical sigue siendo una demanda incumplida", aseguró Gómez.

El legislador, autor del libro "1968, la historia también está hecha de derrotas", explicó que aunque se han abierto algunos archivos oficiales, muchos se mantienen cerrados o fueron desaparecidos.

"No descansaremos para exigirle al Gobierno que diga la verdad sobre los acontecimientos", dijo Raúl Álvarez, también ex líder estudiantil, quien ha participado a lo largo de estos 40 años en las manifestaciones con la consigna: "2 de octubre no se olvida".

Amnistía Internacional (AI) pidió ayer desde su sede en Londres al Gobierno mexicano que aclare la verdad sobre este hecho e instó al presidente Felipe Calderón a "establecer, de una vez por todas, la verdad que hay detrás de la masacre".

En un acto solemne, el alcalde izquierdista de la capital mexicana, Marcelo Ebrard, rindió tributo al movimiento estudiantil de 1968.

"El movimiento del 68 triunfó históricamente. Por eso hoy tenemos gobierno en el Distrito Federal (Ciudad de México)", apuntó Ebrard al explicar que "en buena medida" la democracia que actualmente vive México se debe a "aquellos jóvenes del 68".