Garra del Fandi, magisterio del Juli, usía del Cid y "cuvillos" de bandera

Zaragoza.-  Una corrida que pudo ser memorable con las espadas mejor afiladas, dejó el balance de tres orejas para "El Fandi", quien salió a hombros junto al mayoral de la ganadería de Núñez del Cuvillo, mientras "El Juli" y "El Cid" se repartían sólo una oreja cada uno después de haber estado los dos sencillamente colosales.

ampliar foto

(EFE)

El diestro Julián López "El Juli" da un pase de pecho a su primer toro en la corrida Feria del Pilar celebrada hoy en la plaza de toros de Zaragoza, en la que ha compartido cartel con Manuel Jesús "El Cid" y David Fandila "El Fandi" y en la que se han lidiado reses de Núñez del Cuvillo.

FICHA DEL FESTEJO.- Toros de Núñez del Cuvillo, bien presentados salvo el segundo y de muy buen juego. Aplaudidos todos los arrastres excepto segundo y cuarto. El sexto, de nombre "Rematador", premiado con la vuelta en el arrastre.

Julián López "El Juli": estocada ligeramente trasera y cuatro descabellos (ovación tras un aviso), y estoca corta y tendida (una oreja).

Manuel Jesús "El Cid": estocada y descabello (ovación); y pinchazo, estocada trasera y caída, y un descabello (una oreja tras un aviso).

David Fandila "El Fandi": estocada desprendida (aviso y una oreja con petición de la segunda); y estocada trasera (dos orejas tras un aviso).

En cuadrillas, Rafael Perera "Boni" saludó tras banderillear al segundo y Juan Carlos "Chicote" lidió muy bien al tercero.

La plaza tuvo lleno de "no hay billetes" en tarde espléndida.

----------------------------

POR FIN, EL GRAN ESPECTÁCULO

Muchas cosas sobresalientes. Ya era hora. Se acabó "el papel" en la taquilla, y así tuvo más ambiente el festejo.

Los "núñezdelcuvillo" lucieron presencia, con la excepción del cinqueño segundo, tan escaso de trapío que en alguna plaza de "segunda" no hubiera pasado. Corrida seria, aparentemente astifina, aunque no libre de sospechas por la forma de astillarse los pitones el quinto, abiertas las puntas como brochas.

Pero lo importante del encierro fue su contenido. Justo de fuerzas el primero, sin embargo, extraordinario para el torero. El segundo fue excepción, y no sólo por su birriosa apariencia, pues embistió descompuesto. El tercero, un gran toro, aunque en el caballo ni le regañaron. El cuarto, manso y con genio, fue exigente. También fue completo el quinto, pese a que tomó el primer puyazo con la cara alta y blandeó. Y el sexto, sencillamente extraordinario. Corrida, por tanto, de las que se dan pocas.

Y en los toreros cuenta un "Fandi" que estuvo muy bien con el capote, variado, espectacular y muy seguro en banderillas, y manejando la muleta con garra.

Pero hubo más y mejor de parte de los otros dos alternantes, que, por circunstancias, entiéndase la espada, no llegaron a salir a hombros. "El Juli", un maestro, estuvo importante en sus dos toros, de forma especial en el encastado cuarto. "El Cid", sencillamente colosal, en el quinto cuajó la faena que puede ser de la feria.

Por eso, trofeos al margen, a cada uno sus méritos.

"El Fandi" provocó el primer clamor en la tarde en quite al primer toro del "Cid", cuando ligó chicuelina, tafallera y criolina, con revolera en el remate. Cuatro lances sin despegarse del toro más de metro y medio. Tan asombroso que el mismo "Cid", que previamente había quitado por delantales, salió a dar réplica por verónicas, por cierto, con duende también.

Otro pasaje de histrionismo en el tendido fueron los tercios de banderillas a cargo también del granadino. Dos "moviolas" y "un violinazo" de dentro a afuera en el tercero. Y en el último, un par de poder a poder y dos más sin irse de la suerte, llevando los cuatro palos entre las dos manos para clavar primero "al violín" y tres pasos más adelante de poder a poder.

Dominio absoluto en la suerte de banderillas de un "Fandi" que esta vez con la muleta cumplió también. Sin clase pero vistoso. Sorteó el mejor lote, con un sexto toro de bandera. Ya es importante estar a la altura de las circunstancias con las tres orejas que se llevó.

La primera faena del "Juli", muy bien concebida y estructurada desde el punto de vista técnico, tuvo también especial acento artístico. No aguantaba el toro por abajo, pero supo darle el torero profundidad a su quehacer.

Al cuarto no le pega pases cualquiera si no es con el mando, la seguridad y el poderío del "Juli". Además fue faena con estética, de un figurón del torero que sabe lo que se trae entre manos.

Y ya lo del "Cid". Algo muy serio como estuvo con el quinto, por la exactitud, la hondura y luminosidad de su toreo. Toreó en un espacio mínimo y con un ajuste extraordinario. Hizo sublime lo fundamental. Y majestuosos los adornos, de trinchera, pases del desdén y hasta los desplantes. Toreo de usía.

Qué pena lo de la espada. Un pinchazo, una estocada defectuosa y un golpe de descabello. Así y todo le dieron una oreja que vale su peso en oro.