El Gobierno canario creará una comisión para censar las fosas de desaparecidos en la Guerra Civil

Santa Cruz de Tenerife.-  El Gobierno de Canarias acordó hoy con las asociaciones para la recuperación de la memoria histórica de las islas crear una comisión que se encargue de censar las posibles fosas con enterramientos y realizar las pruebas de ADN, además de colaborar con cabildos y ayuntamientos para que cumplan la ley en esta materia.

El acuerdo lo alcanzaron hoy el presidente canario, Paulino Rivero, y las presidentas de las asociaciones para la recuperación de la memoria histórica de Tenerife, Mercedes Pérez Schwartz; La Palma, Aralda Rodríguez, y Gran Canaria, Balbina Sosa.

Mercedes Pérez Schwartz dijo a los periodistas tras la reunión que el encuentro fue "bastante fructífero" y se concretará en la creación de una comisión dependiente de la Consejería de Presidencia y Justicia para hacer el censo de posibles fosas y la identificación de los cadáveres con pruebas de ADN.

También se pretende coordinar estos trabajos con cabildos y ayuntamientos "para de alguna manera forzarlos a cumplir con la ley de la memoria histórica" ya que, según dijo, hay sitios "con grandes problemas" para que se haga efectiva.

Señaló que en Tenerife los trabajos van "bastante más retrasados", y detalló que las asociaciones han pedido al presidente canario que no tengan que ser los familiares los que tengan que "ir a buscar" las fosas y hacer las excavaciones, sino que de esta labor se encarguen el Gobierno y el resto de instituciones en cooperación con los especialistas.

Añadió que un ejemplo de la "resistencia" a cumplir la ley es que mientras en Tenerife el Ayuntamiento de La Orotava "ha dado ejemplo" al acordar sustituir los nombres de las calles que recuerdan el régimen franquista, en el de la capital "no se ha dado en absoluto cumplimiento".

Mercedes Pérez Schwartz, cuyo abuelo era el alcalde republicano de Santa Cruz de Tenerife y desapareció tras ser detenido el 18 de julio de 1936, responsabilizó "a toda la corporación, y no sólo al equipo de gobierno" en Santa Cruz de Tenerife, de estar "dormidos en los laureles, a unos porque no les interesa y a otros porque parece que no les dan importancia".

Esta situación "me preocupa desde el punto de vista del talante" de una institución "que parece no acatar una ley que pide justicia y reparación para las personas desaparecidas como consecuencia de una Guerra Civil", explicó.

Aralda Rodríguez, presidenta de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de La Palma, afirmó que en dicha isla lo más preocupante es continuar con la identificación de los cadáveres que han sido exhumados, pues los análisis se efectúan por el ADN materno en la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria.

El presidente canario se ha mostrado de acuerdo en pedir al centro universitario que acepte colaborar con otras instituciones para que se analice el ADN por vía paterna con el objetivo de adelantar los trabajos de identificación, dijo Rodríguez.

Además, hay que realizar estas pruebas a cinco cadáveres exhumados en 1994 para tener mayor seguridad en cuando a su identidad, y la asociación necesita más subvenciones para volver a excavar en el barranco de Fuencaliente, añadió.

Las asociaciones calculan que en Canarias puede haber entre 2.000 y 3.000 desaparecidos como consecuencia de la Guerra Civil, de los que unos mil corresponderían a Tenerife, 400 a Gran Canaria y 86 a La Palma, en donde además se registra el problema de que hay constancia de personas desaparecidas que ya no tienen parientes vivos.

En Fuencaliente hay al menos veinte sitios documentados en los que hay enterramientos y se sospecha que también hay más zonas en Mazo, El Paso y Garafía.

En Tenerife hay sospechas de fosas comunes en Los Silos y en la carretera de Las Cañadas del Teide, además de en algunas zonas del sur de la isla, añadió Pérez Schwartz, quien explicó que se intenta hacer un censo basado en los relatos orales de los supervivientes "pero vamos contrarreloj, porque están desapareciendo".