El fiscal pide 53 años de cárcel para Goikoetxea, 22 más que antes del juicio

Madrid.-  La Fiscalía ha aumentado hoy en veintidós años su petición de pena para el presunto líder del último "comando Vizcaya", Arkaitz Goikoetxea, con lo que ha pasado de reclamarle 31 años de cárcel a 53 como autor del lanzamiento de cócteles molotov a dos ertzainas en Portugalete (Vizcaya), el 5 de agosto de 2001.

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(EFE)

El presunto líder del "complejo Vizcaya", Arkaitz Goikoetxea, entre dos guardias civiles, sale esposado de la urbanización del barrio de El Arco, en Logroño, el pasado mes de julio.

Durante el juicio, que ha quedado visto para sentencia en la Audiencia Nacional, el fiscal Juan Moral ha considerado acreditado que Goikoetxea participó en un acto de "kale borroka", protagonizado por "unos salvajes que trataron de acabar con la vida de dos agentes de la Policía Autónoma Vasca".

Ante esa consideración de que pudieron acabar con la vida de los agentes, el representante del Ministerio Público ha decidido modificar sus conclusiones provisionales para que Goikoetxea pueda ser condenado por dos delitos de asesinato en grado de tentativa en lugar de por dos delitos de lesiones terroristas, cuya pena es más leve.

Por cada uno de los intentos de asesinato, Moral ha pedido que Goikoetxea sea condenado a diez años de cárcel, y no a los catorce que solicitaba en total por los dos delitos de lesiones.

De este modo, a los veinte años de cárcel que reclama ahora por los dos intentos de asesinato hay que sumar los diecisiete que ya solicitaba por el delito de estragos terroristas.

Al elevar a definitivas sus conclusiones, Moral ha destacado la gravedad de las consecuencias del lanzamiento de los artefactos incendiarios, que provocaron las quemaduras del 30 y del 10 por ciento en los cuerpos de los ertzainas, así como el incendio del coche policial y de otros cuatro particulares aparcados en la zona.

Según ha aseverado, no cabe "ninguna duda" de la autoría del acusado, dado que "su ADN se encontraba allí", y ha explicado que dos ertzainas hallaron en las inmediaciones de la plaza del Cristo de Portugalete -donde sucedieron los hechos- una capucha "oscura" de la que se recogieron muestras que encajaban con su perfil genético.

Además, en 2005, un agente encargado de seguir la actividad de Goikoetxea, recogió en un bar una copa de la que el acusado había bebido, de la que se extrajo su ADN, que fue después introducido en la base de datos policial, de manera que su perfil genético pudo ser cotejado más tarde con la muestra de la capucha.

Por su parte, el abogado de la defensa ha rechazado la validez de esa prueba, denunciando que no se puede "recoger el vestigio biológico sin conocer su rigor judicial".

Durante la vista también ha comparecido como testigo el etarra Orkatz Gallastegi, condenado por el asesinato del juez Lidón, quien fue compañero de Goikoetxea en la época en la que hacían actos de "kale borroka", entre 1997 y 2002.