Huesos

La otra noche tuve la suerte de ver a la doctora Temperance Brennan vestida de Mujer Maravilla, y a Camille 'Cam' Saroyan convertida en Cat Woman. En ese momento sublime, con las dos científicas de ficción transformadas en superheroínas de ficción, cubiertas de látex y enseñando cacha, me rendí definitivamente y de forma incondicional a 'Bones'. Por si tienen la desgracia de no saberlo, les diré que Temperance Brennan es la antropóloga forense que, interpretada por la actriz Emily Deschanel, protagoniza 'Huesos', la serie de La Sexta, y que 'Cam' Saroyan, interpretada por Tamara Taylor, es la jefa de su laboratorio. Dos supermujeres en un episodio grandioso: 'Mummy in the Maze'. Aquí se pueden leer siete páginas del guión...

Los protas de 'Bones'.

Mi ficción favorita del momento. Sin recurrir a canales de pago, y tras meses de tratamiento psicológico para superar el final de Los Soprano, estoy en condiciones de decir que 'Bones' (La Sexta, jueves 22.30) me parece una serie enorme. Tiene policías, asesinos y forenses. Y también intriga, humor, buenos actores, guiones ingeniosos... y huesos. Todo lo que necesito para ser feliz frente a un televisor.

Me gustan los huesos. No los de santo, que se los dejo a Bono. Los huesos como piezas del rompecabezas que supone el esqueleto de los vertebrados. Como órganos fundamentales para la vida que, una vez que ésta termina, se resisten a la descomposición de los cuerpos. Tanto como para ser capaces de proporcionarnos información fundamental incluso millones de años después. ¿Han sentido cómo se ha paralizado el tiempo en esos viejos gabinetes de los museos de historia natural repletos de fósiles y esqueletos? ¿Han visto algo más bello que el cráneo de un tricerátops?

Lamentablemente, al Gobierno de Zapatero no acaban de gustarle los huesos: ha puesto en manos de las comunidades autónomas la apertura de las fosas de víctimas de la Guerra Civil. Una decisión pusilánime, a la medida de este Gobierno sin sangre, que disgusta profundamente a la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica. Una decisión a la medida de un país que, más de 30 años después de la muerte de Franco, aún tiene estatuas del dictador por las calles de España. Ayer quitaron en Santander la última ecuestre. Todavía queda una sin jaco en Melilla.

Una decisión a la medida de un Estado que no sólo tiene reyes (como Muy muy lejano, el reino de la mujer de Shrek), sino en el que éstos utilizan a sus nietos para felicitar la navidad. No me gusta que se utilice a los niños en temas de promoción y propaganda…

La felicitación de los Reyes.

Y es que la crueldad de algunas personas no tiene límites. Ahora sabemos que los sicarios del régimen de Pinochet ponían música de Julio Iglesias a sus víctimas mientras las torturaban. Dicen que era para acallar sus gritos de dolor (los de los torturados), pero es evidente que esos sonidos espeluznantes son capaces de convertirse en un martirio por sí mismos.

P.D. De la entrevista a Zapatero en Cuatro no digo nada. No dijo nada.

Un motivo para no ver la televisión

El secreto de los fósiles.

Autor: Mauricio Antón.

Editorial: Aguilar.

Mauricio Antón es un genio. Uno de esos individuos de los que deberíamos sentirnos orgullosos. Más famoso fuera de España que en casa, este bilbaíno se ha especializado en reconstruir de manera científica la vida de seres extinguidos. De nuestros antepasados y de otros animales. Todos los grandes museos exhiben sus trabajos, verdaderas obras maestras que seguro que ustedes ya han disfrutado en diferentes exposiciones, revistas, libros y series de televisión.

¿Cuál es el camino que nos lleva desde un puñado de huesos a la imagen que tenemos de un diplodocus, un dientes de sable o un Homo habilis? Antón lo cuenta de una manera increíblemente atractiva. Como si se tratase de una excitante novela de aventuras, podemos emprender un viaje a través del tiempo: yacimientos de fósiles, laboratorios de paleontología, anatomía forense, morfología funcional, animaciones tridimensionales... Un proceso en el que los huesos se cubren de músculos, de piel, de movimiento y, finalmente, de vida.

El milagro de la reconstrucción de las especies extinguidas. Imprescindible para seguidores de 'Bones'.

Entrevista con Mauricio Antón

Web de Mauricio Antón