Irak cierra las urnas y devuelve a los suníes al panorama político

Irak ha vuelto hoy a acoger unas elecciones provinciales —las últimas se celebraron hace cuatro años—. En una jornada marcada por la práctica ausencia de violencia, más de 15 millones de iraquíes han sido llamados a votar para elegir a sus representantes en 14 de las 18 provincias del país. Los comicios de hoy han supuesto el regreso de los grupos suníes —boicoteados en 2005— al escenario político. Pero, además de por eso, son importantes porque el resultado podría anticipar lo que pase en las elecciones generales que se celebrarán a finales de 2009. Servirán como barómetro para medir la popularidad del primer ministro, Nuri al Maliki.

Ali Abbas (EFE)

Los comicios podrían adelantar los resultados de las generales.

¿Por qué es tan importante la participación suní? El regreso de este grupo podría corregir los desequilibrios en el reparto de poder que causó su boicoteo en los comicios de 2005. De esta forma podría reducirse el dominio de la coalición gubernamental (una mezcla de grupos religiosos chiíes y kurdos laicos). Según el Grupo Internacional de Crisis, "mientras que las elecciones de enero de 2005 ayudaron a colocar a Irak en la ruta hacia una guerra civil, estas votaciones podrían representar otro cambio de dirección mucho más pacífico" La corresponsal de la CNN asegura desde el terreno haber percibido un mayor optimismo entre los votantes, quienes sentían que su participación sí podría tener impacto sobre sus vidas y sobre su país.

De todas formas habrá que esperar hasta la próxima semana para conocer los resultados. De momento, las urnas han sido transportadas a la sede central electoral de cada provincia y de allí a Bagdad, donde comenzará el recuento de los votos.

Al contrario que en 2005, cuando las elecciones estuvieron marcadas por la violencia y sólo acudió a las urnas un 2% de los electores, el día ha transcurrido en relativa calma. De hecho, el horario para acudir a votar se alargó una hora más de lo previsto debido a la alta participación. Hasta el momento sólo se han registrado algunos incidentes aislados. Uno de ellos ha ocurrido en el barrio bagdadí de Ciudad Sadr donde ha muerto un civil y otro ha resultado herido por los disparos de agentes de la policía. Horas antes, fallecieron dos agentes que vigilaban un colegio electoral en la ciudad de Mosul, 400 kilómetros al norte de Bagdad, por los disparos de soldados estadounidenses. Asimismo, otros seis policías resultaron heridos al explotar un artefacto al paso de la patrulla en la que viajaban en la zona de Toz, situada a 90 kilómetros de Tikrit, capital de Salahedin.

La relativa calma se debe al despliegue de agentes que se ha llevado a cabo. Un total de 800 observadores internacionales han supervisado las votaciones después de que esta semana hombres armados matasen a tres candidatos suníes en Bagdad, Mosul y la provincia Diyala. En total han muerto hasta el momento ocho de los más de 14.000 candidatos que se inscribieron para las elecciones.

Para saber más:

• Las mujeres iraquíes luchan por entrar en política, por 'The Guardian' (en inglés).