Touriño, un economista que tratará de revalidar el cambio y encarar la crisis

Santiago de Compostela.-  Emilio Pérez Touriño, presidente de la Xunta y candidato a la reelección, concurre a las elecciones del 1 de marzo por tercera vez, convencido de que su experiencia como economista y su gestión al frente del Gobierno gallego le avalan para encarar la crisis y revalidar el cambio político.

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(EFE)

El candidato del PPdeG a la Presidencia de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, durante la presentación del programa electoral del Partido Popular, ayer en Santiago de Compostela.

Nacido en A Coruña en agosto de 1948, Pérez Touriño, casado con la maestra Esther Cid, que le suele acompañar en muchos actos públicos, padre de dos hijos y abuelo de dos nietos pequeños, consiguió la Presidencia de la Xunta en las elecciones del 19 de junio de 2005.

Como muchos miembros de generación, el también secretario general del PSdeG comenzó su andadura en política en la Universidad de Santiago, a finales de los convulsos y decisivos años 60.

Doctor en Ciencias Económicas, el actual presidente de la Xunta se forjó políticamente en las batallas estudiantiles contra la dictadura en la Universidad de Santiago, de la que luego fue profesor de Economía aplicada entre 1973 y 1985, y vicerrector para asuntos económicos.

Pérez Touriño, que milita en el PSOE desde 1988, fue nombrado director jefe del Gabinete del Ministerio de Transportes en 1986 y pasó a ser subsecretario durante la época de Abel Caballero como ministro, y también ocupó responsabilidades durante la gestión de José Borrell.

El candidato socialista estuvo ligado a las obras para la celebración de los actos de 1992 y fue uno de los que preparó el plan director de infraestructuras, así como la ejecución de las autovías de enlace de Galicia con la Meseta.

Cesó en el cargo a petición propia en 1994 para incorporarse a la labor docente en la facultad de Económicas y dos años después, regresó a la política para volcarse en Galicia.

En un momento muy complicado para el PSdeG y tras la renuncia del entonces secretario general, Francisco Vázquez, Pérez Touriño asumió la dirección de los socialistas gallegos en 1998; fue reelegido luego en 2000 y nombrado secretario ejecutivo de la dirección socialista liderada por José Luis Rodríguez Zapatero, en la que permaneció hasta 2004.

Pérez Touriño, a quien su condición de economista le lleva a rodear de datos sus intervenciones, fue candidato a la Presidencia de la Xunta por primera vez en octubre de 2001, en que logró casi equiparar el PSOE al BNG, al empatar a 17 escaños, enmendando así el "sorpasso" que los nacionalistas de Xosé Manuel Beiras habían logrado en las autonómicas anteriores.

El 19 de junio de 2005, Pérez Touriño se hizo con la Presidencia de la Xunta, al obtener el PSOE 25 diputados, ocho más que en 2001, y 13 los nacionalistas, liderados por Anxo Quintana, que se convertiría en su vicepresidente, y ahora nuevamente rival en la candidatura del Bloque.

El pasado 5 de enero firmó el decreto de convocatoria de elecciones, que correspondería celebrar en junio, para el 1 de marzo, contra el criterio de algunas voces de su partido que pretendían anticiparlas. No obstante, Pérez Touriño hizo prevalecer su deseo de que, antes de los comicios, la época de crisis requería antes la aprobación de los presupuestos.

Pese a los reproches del PP sobre las diferencias de criterio que socialistas y nacionalistas han mantenido en algunas ocasiones durante la legislatura, a Emilio Pérez Touriño le gusta presumir de que el Gobierno de coalición ha sido el más estable de la historia de la autonomía, puesto que todos sus miembros se han mantenido desde la formación del Ejecutivo.

Durante los primeros años de su gestión, Pérez Touriño no se cansó de repetir que Galicia consiguió reducir el diferencial que le separa de España y Europa. En los últimos meses ha reiterado que Galicia mantiene un "plus de resistencia" frente a la crisis, ya que su nivel de paro es inferior a cuando Manuel Fraga gobernaba, por lo que emplaza a los electores a mantener el cambio en el modelo político y económico.