El Gobierno canario propone un pacto ante la crisis, la patronal acepta y los sindicatos lo cuestionan

Las Palmas de Gran Canaria.-  El Gobierno canario propuso hoy un "gran pacto socioeconómico" para paliar los efectos de la crisis en las islas a empresarios y sindicatos, que los primeros consideraron oportuno y los segundos cuestionaron, aunque pidiendo ambos por igual que se concreten las propuestas.

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(EFE)

El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero (i), durante la reunión mantenida hoy en Las Palmas de Gran Canaria con representantes de los empresarios y sindicatos para tratar las posibles modificaciones del Régimen Económico y Fiscal (REF) que permitan a las pequeñas y medianas empresas afrontar el período de crisis.

Bonificaciones o exenciones fiscales para proyectos empresariales, en especial los nuevos que se pongan en marcha a pesar de la crisis, pero también para particulares que acumulen tiempo en el paro u otros, son algunas de las medidas que se prevén enmarcar en ese pacto, según anunció el vicepresidente autonómico, José Manuel Soria, tras una reunión con patronal y sindicatos.

Un reunión del Consejo Asesor del Presidente del Gobierno Autónomo que convocó su titular, Paulino Rivero, tras la cual los representantes de Comisiones Obreras y de la Unión General de Trabajadores destacaron que, a su entender, esa propuesta de diálogo se contradecía con la actitud que hasta ahora ha mostrado el Ejecutivo, al no posibilitar el cierre de la concertación social.

"Algo por lo que llevamos esperando muchos meses", destacó el dirigente de CCOO Pedro Costeras, que insistió, ante la propuesta del Gobierno, en que, "ese diálogo social es precisamente lo que hemos venido demandando durante el año pasado".

Como prueba de sus críticas, aludió a la decisión del Ejecutivo de poner en marcha medidas contra la crisis que no fueron previamente consensuadas con los agentes sociales.

Desde ese escenario, recalcó que en este nuevo llamamiento del Gobierno de Canarias, si se quiere contar con su sindicato, deberá tenerse en cuenta su opinión antes de decidir aplicar cualquier medida del propuesto pacto.

Además, anticipó que Comisiones Obreras no admitirá, en todo caso, ninguna exención fiscal para empresarios que no vaya condicionada al mantenimiento o la creación de puestos de trabajo.

En similares términos se expresó la secretaria general de la UGT en Canarias, Alicia Rodríguez, quien ofreció la colaboración de su organización al Gobierno pero, según precisó, "para un diálogo real, no para hacerse la foto".

Rodríguez coincidió, además, con Pedro Costeras en especificar que la UGT entiende que la propuesta de acuerdo contra la crisis formulada hoy desde el Gobierno se debe enmarcar en los quintos acuerdos de concertación social de Canarias, que también rememoró que siguen pendientes de negociaciones paralizadas hace meses, según los sindicatos, por falta de voluntad del Ejecutivo.

Su parecer no fue compartido, sin embargo, por la patronal, en cuyo nombre el presidente de la Confederación Canaria de Empresarios, Sebastián Grisaleña, declaró que coincidía con el Ejecutivo en que el pacto contra la crisis debe ser "algo más amplio" que los acuerdos de la concertación social.

Unos acuerdos que, además, dijo que no han logrado avanzar los sindicatos por no ser "más dialogantes", a diferencia de lo que ha ocurrido con la patronal, que aseguró que, pese a tener diferencias en principio con el Ejecutivo, ha logrado acercar posturas en los últimos meses mediante la negociación bilateral.

Por todo ello, Grisaleña respaldó, en principio, el llamamiento del Gobierno canario, aunque pidiendo, al igual que los sindicatos, que en la próxima reunión que se convoque para proseguir con el diálogo se ofrezca un informe concreto con datos de los resultados de las medidas que el Ejecutivo ha ido anunciando contra la crisis económica en el último año.

Un balance que se ofrecerá de forma detallada, ya que se tratará de medir iniciativas "muy concretas" y fácilmente ponderables, según aseguró José Manuel Soria.