Foxley descarta que su salida implique cambios frente a la demanda peruana

Santiago de Chile.-  El hasta hoy canciller chileno, Alejandro Foxley, descartó que su salida implique algún cambio en la postura de su país frente a la demanda del Perú ante el Tribunal de La Haya, en procura de una modificación del límite marítimo entre ambos países.

"Aquí ha habido y va a haber una sola voz", afirmó de forma tajante Foxley a los periodistas, después que la presidenta Michelle Bachelet confirmase su alejamiento del cargo, para el que designó a Mariano Fernández, actual embajador de Chile en EE.UU..

El sorpresivo cambio de gabinete resuelto por Bachelet, incluido el ministro de Relaciones Exteriores, se produjo a pocos días de que Perú presente en La Haya los fundamentos de su demanda, con la que busca incorporar a su territorio unos 35.000 kilómetros cuadrados de mar hasta ahora bajo soberanía chilena.

Perú sustenta su demanda en que el límite marítimo entre ambos países nunca ha sido fijado, mientras Chile sostiene que no existe litigio, pues esos límites fueron establecidos en tratados suscritos en 1952 y 1954, que para el Gobierno peruano son solamente acuerdos pesqueros.

Foxley, que durante su gestión insistió en establecer con Perú una relación "que mire al futuro", fue duramente criticado en el país vecino la semana pasada, cuando dijo que había políticos peruanos anclados en el siglo antepasado, debido al rechazo de ciertos sectores al tratado de libre comercio acordado por ambos gobiernos.

"La posición de Chile en materia limítrofe, y particularmente en el límite marítimo, es una posición histórica invariable", subrayó hoy Foxley, al descartar que la llegada de un nuevo canciller suponga alguna modificación en esa postura.

Agregó que esa posición "está fundamentada en tratados que existen hace más de 50 años, tratados valorados y aceptados no sólo por Perú y Chile, también por Ecuador".

Foxley, que durante el gobierno de Patricio Aylwin fue ministro de Hacienda, aseguró que abandona la Cancillería para retomar "un proyecto personal largamente postergado" enfocado en la "generación de ideas".

"Este país necesita mirar más allá del corto plazo. Estamos a mitad de camino del desarrollo y la etapa que viene es extremadamente crítica", puntualizó.

Agregó que reanudará su actividad en la Corporación de Estudios para Latinoamérica (CIEPLAN), una institución académica centrada en el estudio de políticas públicas y la economía política, con una perspectiva nacional y regional.

Recalcó que su salida del Gobierno era un asunto previamente conversado con la presidenta Bachelet .

"Algunas personas deben tener el coraje de dejar una posición atractiva como es una Cancillería para dedicarse a lo que creo son necesidades muy fundamentales del país mirando al futuro", agregó el jefe saliente de la diplomacia chilena.

Foxley descartó que su salida se deba a los últimos encontronazos diplomáticos que ha protagonizado Chile, como el desencuentro con Cuba por las declaraciones de Fidel Castro a favor de una salida al mar para Bolivia.