La fallida fusión con CCM coincide con los 20 años del germen de Unicaja

Málaga.-  La absorción que iba a hacer Unicaja de Caja Castilla-La Mancha (CCM), fallida tras ser intervenida ésta última por el Banco de España, coincide con los veinte años de la firma del protocolo para fusionar cuatro cajas de ahorros de Málaga y Almería y crear Unicaja, a lo que se sumó una quinta, la de Cádiz.

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(EFE)

Exterior de una sucursal de Unicaja. EFE/Archivo

Hoy se cumple el veinte aniversario de aquel protocolo de intenciones firmado en Almería por los presidentes del Monte de Piedad y Caja de Ahorros de Ronda por un lado y Almería por otro, Braulio Medel y Enrique Vázquez respectivamente; de la Caja de Ahorros Provincial de Málaga, Antonio Maldonado, y de la Caja de Ahorros y Préstamos de Antequera, Gumersindo Ruiz.

El objetivo de entonces era el de crear en dos años una sola caja que entonces se decía que podría denominarse "Cajasol", nombre que con el paso del tiempo ha servido para llamar en Sevilla a otra caja resultado de una fusión, entre El Monte de Huelva y Sevilla y la Caja San Fernando de Jerez y Sevilla, como acordaron sus asambleas el 30 de noviembre de 2006.

Aquellas cuatro cajas de Málaga y Almería -según se decía hace dos décadas- iban a dar lugar a la sexta de las cajas confederadas de España y poco más de tres meses después la Caja de Ahorros de Cádiz se integró en ese proceso de fusión tras garantizarse el mantenimiento de todos los puestos de trabajo que había en las cinco entidades constituyentes.

Con los años, las intenciones de crecer seguían vigentes y Unicaja, primera entidad financiera de Andalucía, fraguaba sumar CCM para constituir una de las cinco primeras cajas de ahorros españolas.

Sin embargo, ayer mismo la andaluza "dio por finalizadas las conversaciones e iniciativas en orden a un posible proyecto de integración" con la caja manchega, una vez que ésta fue intervenida.

Medel -que encabezaba la Caja de Ronda cuando se firmó el protocolo y hoy preside Unicaja- recordaba a primeros de este año que en aquel acuerdo "ya decíamos que era un proyecto que podía tener continuidad, que se continuara en el camino de la concentración entre entidades financieras andaluzas" y que no cambió de postura "porque ese espacio potencial seguía existiendo".

Este año se cumple también el 125 aniversario de la fundación de la caja más antigua de las que formaron Unicaja -la Caja de Ahorros de Cádiz- y el centenario de la raíz más corpulenta que contribuyó a la fusión -la Caja de Ronda-, una doble conmemoración o efemérides que celebran con diversos actos.

Acaban de cumplirse 18 años de que los cinco presidentes de las referidas cajas de Málaga, Almería y Cádiz firmaran la escritura de constitución de Unicaja, último trámite que restaba para dar a la nueva entidad personalidad jurídica propia, lo que hicieron en Málaga -donde está su sede social- el 18 de marzo de 1991.

La nueva entidad se denominó "Monte de Piedad y Caja de Ahorros de Ronda, Cádiz, Almería, Málaga y Antequera", aunque comercialmente sería y es "Unicaja", y estaba entre las cinco primeras de España.

Unicaja se formó con unos recursos ajenos en torno a 750.000 millones de pesetas y un activo superior a 793.000 millones, disponía de 755 sucursales donde trabajaban más de 4.500 empleados y tenía implantación en Andalucía, Melilla, Madrid y Ciudad Real, mientras en 2008 sus recursos ajenos ascendieron a 27.565 millones de euros y el beneficio neto atribuido ascendió a 286,1 millones.

Braulio Medel, encargado de presidir la nueva entidad cuando era también presidente de las confederaciones de cajas de ahorros españolas y andaluzas, calificó como "trascendente" el momento de la firma y señaló que "no se termina nada", sino que "empieza algo".

La coordinadora ciudadana "Ronda por su caja" intentó impedir aquel proceso de fusión e interpuso una demanda judicial, que retiró tras un acuerdo con Unicaja por el que la entidad crearía en la ciudad rondeña una Fundación con un presupuesto anual de 350 millones de las antiguas pesetas y una sociedad de promoción industrial dotada con cien millones de entonces.

Las asambleas de las cinco cajas votaron el 24 de febrero de 1990 su fusión en la nueva entidad, aunque la de la Caja de Almería votó negativamente y hubo de celebrar otra el 26 de mayo, que finalmente ratificó el proceso.