PJ Harvey está tan mal como parece

PJ Harvey ha publicado un nuevo álbum, pero no en solitario. 'A Woman A Man Walked By' es una nueva colaboración con su buen amigo (y sólo amigo) John Parish, a quien conoció en los 80, antes de debutar, y que ha sido una ayuda constante a lo largo de toda su carrera. John Parish tocó la guitarra, la batería y el órgano en el celebrado 'To Bring You My Love' (1995) y ha coproducido la mayoría de los discos de PJ Harvey, incluso el último 'White Chalk' (2007).

Como "PJ Harvey y John Paris" ya firmaron otro disco en 1996, 'Dance Hall At Louse Point', pero en la era internet y una década de prestigio después para los dos (él ha trabajado también con Eels, Tracy Chapman y Giant Sand), este 'A Woman A Man Walked By' no va a pasar tan desapercibido.

La diferencia con respecto a los álbumes de PJ es que la música no está hecha por ella sino por él. Tras el ataque de piano que le dio en 'White Chalk', vuelven las feroces guitarras de sus años 90 o 'Uh Huh Her'. Sin embargo, las letras sí siguen siendo suyas y eso es algo que se nota en tanto que las paranoias de Polly Jean siguen acompañando a esos guitarrazos tan crudos. Vuelven algunas de sus típicas idas de olla:

• El amor sucio: El single 'Black Hearted Love' es una canción de amor, como su propio nombre indica. Pero por supuesto no muestra ninguna concesión a lo cursi. A PJ le gusta lo oscuro, su sonido es más que áspero y de lo que habla es de almas "que se entregan al asesinato". Algo de lo que sabían mucho las 'Murder Ballads' de Nick Cave.
• La muerte: Uno de sus temas favoritos vuelve a aparecer, en concreto en la canción que cierra el disco, 'Cracks In The Canvas', casi a cappella. La muerte metafórica le importa tanto como la real y, a pesar del desconsuelo de que "no quede nada, ni siquiera un funeral", a menudo los ángeles hacen un cameo en sus letras a modo de consuelo. Este es otro de los ejemplos.
• La pérdida de un hijo: El tema 'The Chair' habla sobre la muerte de un hijo, "Daniel, el más pequeño". Curiosamente, el single de su anterior álbum, 'When Under Ether' hablaba sobre un aborto. En las referencias al agua, hay quien también ve un guiño a 'Down By The Water', uno de sus grandes clásicos.
• El sexo guarrete: Muchas de sus canciones más agresivas en lo sonoro han contenido una carga sexual muy fuerte, como 'Rid Of Me' o 'Man-Size'. El 'Man-Size' de este disco es el tema que le da nombre, sobre un hermafrodita, con lenguaje repugnante y no se sabe cuánto sentido del humor, ironía y cuánto de crítica. Ella simplemente hace el retrato.
• La culpa: En la delicada 'The Soldier', que sí podría haber cabido en 'White Chalk', vuelve a hablar de culpa. Este sentimiento junto a la búsqueda del perdón es algo que ha perseguido a PJ Harvey en canciones anteriores como 'Broken Harp'.
• Los espacios: PJ Harvey dedicó su disco más accesible, 'Stories From The City Stories From The Sea' a una ciudad, Nueva York. Le puede interesar América, pero desde luego no le gusta nada California, de la que habla mal en su nuevo tema 'Leaving California'. "Cómo pude creer que podría vivir y respirar a través de ti".

'A Woman A Man Walked By' no es un disco 100% PJ Harvey... sólo porque ellos se empeñan en firmarlo de otra manera. En cualquier caso, bienvenido.