Un aspirante presidencial dice que la respuesta del Gobierno a EEUU no es adecuada

Teherán.-  El aspirante reformista a la candidatura presidencial Mehdi Karrubi criticó hoy la respuesta del actual Gobierno iraní a la propuesta de acercamiento de Estados Unidos, ya que, en su opinión, no está siendo constructiva.

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(EFE)

El aspirante reformista a la candidatura presidencial Mehdi Karrubi, druante la rueda de prensa que ofreció hoy en la que criticó la respuesta del actual Gobierno iraní a la propuesta de acercamiento de Estados Unidos, ya que, en su opinión, no está siendo constructiva.

En un desayuno de trabajo ofrecido a la prensa en Teherán con un grupo de asesores, el ex presidente del Parlamento también se mostró dispuesto a hablar con el presidente de EEUU, Barack Obama, si triunfa en las elecciones del próximo 12 de junio.

"Los mensajes de EEUU también dependen del comportamiento de Irán y lamentablemente la respuesta que tenemos no se amolda a nuestros intereses nacionales", afirmó el ex alcalde de Teherán y asesor del aspirante, Gholan Husein Kavarzi.

"Si hubiéramos tenido un Gobierno más reflexivo habríamos podido tener mejores mensajes de Obama", añadió.

Karrubi, que las presidenciales de 2005 quedó en tercer lugar con más de cinco millones de votos, compareció ante la prensa para presentar su programa rodeado de sus principales asesores, a los que no dudó en ceder la palabra en varias ocasiones debido a la afonía que padecía.

El clérigo reformista criticó, no obstante, la postura de Obama, al que acusó de no haber pasado aún a la acción.

"Las propuestas que plantea son útiles, como su petición de que se erradique la desconfianza hacia el islam. Es útil tanto para EEUU como porque trata de suavizar las relaciones", afirmó.

"Pero si se tiene en cuenta que las relaciones son turbias desde hace muchos años, antes y después de la revolución, las palabras son buenas pero se necesitan hechos", agregó.

En este sentido, Karrubi sugirió que un primer paso sería el levantamiento de las sanciones internacionales, comerciales y financieras, que pesan sobre el país.

"En un futuro Gobierno, Karrubi intentaría evitar los conflictos con el mundo y ampliar las relaciones de Irán. Para ello hablaría con personalidades diversas, como Obama", terció por su parte Karvazi.

Estados Unidos e Irán rompieron sus lazos diplomáticos en abril de 1980, una vez consolidado el triunfo de la revolución islámica que desalojó del poder al último Sha de Persia, el pro occidental Mohamad Reza Pahlevi.

Nada más acceder a la Casa Blanca, Obama expresó su deseo de abrir un nuevo capítulo en las relaciones con Irán, oferta que ha inquietado a algunos sectores del régimen de los ayatolá.

Hasta la fecha, la respuesta de Irán ha sido cauta: mantiene sus denuncias a Estados Unidos al tiempo que le exige un cambio tangible en su política y una disculpa oficial.