¿Dónde queda la intimidad en torno a las víctimas del AF 477?

SAO PAULO.-  Cuando se producen accidentes como el del Airbus 330-200 desaparecido el lunes sobre el Atlántico la prensa está lista para revelar todos (o casi todos) los detalles del siniestro por medio del testimonio de familiares y especialistas. Nadie parece plantearse si supone algún problema que los datos divulgados afecten a los que perdieron a alguien en el vuelo. Los psicólogos avisan sobre las consecuencias de esta violación de la intimidad.

EFE (EFE)

Familiares de las víctimas esperan noticias en el aeropuerto de Río de Janeiro (Brasil).

Air France todavía no tiene fecha para publicar el listado oficial de pasajeros del avión. La ley francesa prohíbe que la empresa aérea o el Gobierno revelen datos. En Brasil, según la ley, no pueden divulgarse los nombres sin que todas las familias sean informadas previamente.

Sin embargo, parientes, amigos o empresas donde trabajaban 96 de las víctimas no dudaron en buscar a la prensa brasileña para contar la historia de sus desaparecidos. Hoy los brasileños conocen datos sobre el chico que había viajado desde Inglaterra para celebrar su cumpleaños en familia, la pareja que se casó un día antes del viaje de luna de miel a París, o el viajero que fue a Europa para recibir un premio. Estos y otros relatos están disponibles en los medios de comunicación electrónicos, audiovisuales o impresos del país.

Lo que opinan los expertos

El problema, según la psicóloga Natalia Leme, es que la red social de una persona hoy es muy amplia y puede suceder que uno no sepa sobre la muerte de su primo mientras a la prensa ya le ha revelado toda su vida otro familiar. "Los medios salen en búsqueda de conocidos de los que estaban en el avión y la familia no tiene control de lo que será divulgado", cuenta.

La psicóloga alerta sobre las consecuencias que puede tener la filtración: "Incluso cuando es una persona de la familia quien se acerca a la prensa, no siempre comprende el alcance de su acto, lo que representa tener que convivir en todo momento con la presencia pública de la persona amada".

«Para algunos resulta un homenaje tener la imagen de su hijo o padre en los periódicos. Sin embargo, los reportajes pueden afectar hasta a los que no tienen nada que ver con el accidente y provocar miedo de volar, incluso crear cierta ansiedad frente a la muerte, que al fin y al cabo es algo inevitable», explica el psicólogo Raoni Pereira Rodrigues.

Mientras en Brasil continúa la sangría de filtraciones, la prensa francesa no divulga los motivos por los que se desplazaban las víctimas ni ningún detalle sobre su vida.

Y tú, ¿qué piensa sobre la divulgación de historias sobre los que estaban en el avión?

Para saber más:

• El accidente minuto a minuto en lefigaro.fr y en rue89
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