Rotundo Galán, cuatro orejas, a hombros con Hermoso de Mendoza

León.-  El rejoneador Sergio Galán fue el gran triunfador del festejo de rejones celebrado hoy en León, al cuajar una rotunda actuación de cuatro orejas, saliendo a hombros junto a Hermoso de Mendoza, que sumó dos apéndices, mientras que Fermín Bohórquez, que también rayó a gran altura, cortó una.

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(EFE)

El rejoneador Sergio Galán pone un par de banderillas a su segundo toro.

Se lidiaron toros de Castilblanco, aceptablemente presentados y de buen juego en conjunto a excepción del soso y parado primero.

Fermín Bohórquez, ovación y una oreja.

Pablo Hermoso de Mendoza, dos orejas y ovación.

Sergio Galán, dos orejas y dos orejas.

La plaza tuvo tres cuartos de entrada.

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GRAN TARDE DE REJONEO

Galán desorejó por partida doble al tercero, al que toreó variado y espectacular en todos los tercios. Y con el quinto, más de lo mismo, importante faena de Galán ante un manejable toro, con el brilló a gran altura con toda su cuadra, dejando patente un buen concepto del rejoneo en el que aunó clasicismo y también espectáculo. Labor redonda, premiada también con las dos orejas.

Hermoso realizó una buena faena a su primero, al que realizó una labor de técnica y torería montando a los caballos Tiziano, Pirata y el debutante Florero. Fue premiado con las dos orejas. Con el manejable quinto volvió Hermoso su magisterio del rejoneo, sobre todo, por la espectacularidad y pulcritud con la que ejecuta todas las suertes, muy certero y reunido en banderillas. Lo malo fue con el rejón de muerte, perdiendo aquí los trofeos

Bohórquez imprimió su estilo clásico y más puro para torear al que abrió plaza, toro parado y nada colaborador, al que el jerezano exprimió al máximo, aunque sin suerte al matar. En el cuarto, que se movió más, Bohórquez volvió a tirar por el camino de la sobriedad y 'lo clásico' para cuajar una buena faena que se quedó sin trofeos, de nuevo por su desacertado manejo de los aceros.