Buehrle fue el "Sr.Perfecto" y los Medias Blancas comparten el liderato

Chicago (EE.UU.).-  El abridor Mark Buehrle volvió a dar una gran exhibición de dominio sobre el montículo al retirar de forma consecutiva a los 27 bateadores de los Rays de Tampa que enfrentó para conseguir el decimosexto partido perfecto en la historia de las Grandes Ligas.

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U.S. Cellular Field fue el escenario de la nueva gesta de Buehrle, que logró su primer juego perfecto como profesional después que los Medias Blancas de Chicago ganaron por 5-0 a los Rays de Tampa Bay. EFE/Archivo

U.S. Cellular Field fue el escenario de la nueva gesta de Buehrle, que logró su primer juego perfecto como profesional después que los Medias Blancas de Chicago ganaron por 5-0 a los Rays de Tampa Bay.

"Es algo muy difícil de asimilar y todavía me siento como en una nueve después de asumir que he sido capaz de no permitir nada a los grandes bateadores de los Rays", comentó Buehrle. "Es el sueño de cualquier lanzador, en poder un día estar perfecto".

Buehrle (11-3) recibió la ayuda de una sensacional atrapada en la apertura del noveno episodio del jardinero central DeWayne Wise, quien estiró el guante sobre el muro para preservar el juego perfecto y la blanqueada.

"DeWayne estuvo sensacional con esa jugada, sólo gracias a la gran defensa del equipo también fue posible que al final viviésemos esta alegría, que es de todo el equipo", señaló Buehrle.

Wise entró al partido en el inicio de la entrada como reemplazo defensivo. El primer bateador Gabe Kapler abrió el episodio con un batazo a lo profundo del bosque izquierdo-central.

El jardinero corrió con todo, dio un brinco y puso el guante sobre la cerca para robarle un jonrón a Kapler.

La pelota estuvo punto de salírsele del guante al bajar de la cerca, pero Wise supo retenerla y se la exhibió a la afición con su mano izquierda.

"Crucé los dedos para que la pelota no se fuese, de que iba a tener margen para atraparla. Era consciente de que todos mis compañeros estaban haciendo todo lo posible para preservar el juego sin hits, el juego perfecto, lo que fuese", señaló Buehrle.

El receptor cubano Michel Hernández se ponchó para el segundo "out". Con los 28.036 fanáticos que llegaron al U.S. Cellular Field, coreando el nombre de Buehrle, el campocorto Jason Bartlett fue puesto fuera con una roleta, precisamente, por el territorio que el cubre cuando está en el diamante.

"La verdad es que no me creo haberlo logrado. Tenemos un vuelo corto a Detroit. Creo que después habrá un poquito más de euforia", admitió Buehrle.

Se trata de su segundo juego sin hits en su carrera. La vez anterior fue con una victoria 6-0 sobre los Vigilantes de Texas el 18 de abril de 2007, juego en el que enfrentó al mínimo de 27 bateadores.

Entonces, el juego no pudo ser perfecto porque le dio la base por bolas al dominicano Sammy Sosa con un lanzamiento en cuenta de 3-1 y un "out" en el quinto episodio. Un par de lanzamientos después, Buehrle sacó "out" al propio Sosa al sorprenderlo fuera de base.

El juego perfecto de Buehrle fue decimoctavo en la historia de las mayores y el decimosexto en la era moderna que comenzó en 1900.

El último lanzador en lograr la hazaña fue Randy Johnson, de los Cascabeles de Arizona contra los Bravos de Atlanta, el 18 de mayo de 2004.

Por su parte, el manejador de los Medias Blancas, el venezolano Ozzie Guillén, alabó el comportamiento de todo el equipo en una jornada triunfal.

"Lo único que puedo decir es que todo el equipo ha estado extraordinario y que además con este triunfo también llegamos a compartir el primer lugar de la clasificación en la División Central, lo que para nosotros es una jornada triunfal y muy emotiva", destacó Guillén.

En otros resultados de partidos disputados durante la jornada matinal, los Tigres de Detroit, rivales directos de los Medias Blancas, perdieron por 2-1 frente a los Marineros de Seattle.

La derrota, segunda consecutiva, los deja con marca de 49-44, mientras que los Medias Blancas tienen 50-45, para quedarse a sólo un punto por debajo en el promedio en la lucha por el primer lugar de la División Central.

Ambos equipos comienzan una serie en Detroit a partir de mañana, viernes.

El abridor Jarrod Washburn (8-6) lanzó una blanqueada a lo largo de siete episodios para ser la figura de los Marineros, que han ganado ocho de los últimos 10 partidos disputados.

El novato David Huff se anotó su primera victoria en tres salidas, el surcoreano Shin-Soo Choo remolcó dos carreras con un triple y los Indios de Cleveland ganaron 5-4 a los Azulejos de Toronto para salir airosos en la serie.

El zurdo Huff (5-4) permitió cuatro carreras y ocho imparables en siete entradas y dos tercios, dio una base por bolas y sacó cuatro ponches.

Dentro de la Liga Nacional, los Gigantes de San Francisco vencieron por 5-1 a los Bravos y rompieron una racha de tres derrotas consecutivas.

La derrota les costó a los Bravos acabar con cuatro triunfos consecutivos y dejar su marca en 49-47, la misma que tienen los Marlins de Florida en el segundo lugar de la División Este del "Viejo Circuito".