Blanco a 90 minutos de su primer título con el Fire y un botín de un millón de dólares

Chicago (EE.UU.).-  La 'Ciudad de los vientos' se prepara para la final de la tercera edición de la SuperLiga, que dará un millón de dólares al mejor entre el Fire de Chicago y los Tigres de la UNAL, y cuya figura es Cuauhtémoc Blanco, en busca del primer título desde que llegó a Estados Unidos, hace tres años,

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(EFE)

Cuauhtémoc Blanco es consciente de la nueva oportunidad que tiene de inscribir su nombre con un título histórico para el Fire y se encuentra con doble motivación de cara al encuentro. EFE/Archivo

El mismo objetivo del delantero mexicano Blanco lo persiguen sus compañeros, el defensor colombiano Wilman Conde, recientemente seleccionado para el Partido de las Estrellas de la MLS, el guatemalteco Marco Pappa y el costarricense Gonzalo Segares, que juega su duodécima temporada en la MLS.

El 'sueño americano' en SuperLiga de Blanco, Conde, Pappa y Segares podrá realizarse este miércoles en el Toyota Park, de Bridgeview, cuando el Fire recibirá a los Tigres de la UNAL.

Será el último capítulo del torneo que el 20 de junio comenzaron a disputar ocho equipos, cuatro de la Liga Profesional de Estados Unidos (MLS) y cuatro de México.

Blanco, de 36 años, que vive una tercera etapa profesional llena de éxitos dentro de la (MLS), que le ha permitido inclusive volver a la selección nacional bajo la dirección el entrenador Javier Aguirre, tiene todavía la asignatura pendiente de conseguir un título con el Fire.

El jugador mexicano ha triunfado en el apartado individual. El equipo también ha estado cerca de llegar al partido por el título de liga, pero siempre se han quedado a las puertas.

Blanco es consciente de la nueva oportunidad que tiene de inscribir su nombre con un título histórico para el Fire y se encuentra con doble motivación de cara al encuentro.

Además, la última vez que el Fire disputó la final de algún torneo, el equipo era dirigido por Dave Sarachan y su referente de ataque era el costarricense Andy Herrón.

El Fire ganó al Galaxy de Los Ángeles para conseguir de la Copa Abierta Lamar Hunt, la competición más antigua que hay dentro del fútbol estadounidense, pero que carece de repercusión internacional.

Blanco y el Fire saben de la importancia del partido frente a los Tigres y llegan al mismo convencidos que pueden conseguir el triunfo que tanto anhelan y más cuando ha sido su debut en la competición.

La condición de jugar como local es algo que también puede ayudar al Fire a tener más opciones de conseguir la victoria después que el pasado 15 de julio, en semifinales, ganó por 2-1 al Revolution de Nueva Inglaterra, en el Gillette Stadium.

A pesar de salir como locales, Blanco advierte que el peor error que podrían cometer sería confiarse que el hecho de jugar en su campo les va a tener asegurada la victoria cuando, además, los Tigres fueron el único equipo que les ganó durante la fase de grupos por 2-1, con goles de Armando Pulido.

"Tigres es un buen equipo, se reforzó bien y tiene excelentes jugadores y a ellos nosotros no les podemos dar libertad porque son capaces de castigarte", advirtió Blanco.

Para el ariete, enfrentar su primera gran final con el Fire es algo que le genera una motivación especial, dado que puede lograr el título que tanto ha soñado.

"Será un partido difícil, pero tenemos que aprovechar que estamos en casa con nuestra gente y esperamos nos acompañe y nos aliente mientras nosotros tratamos de conseguir ese título", subrayó Blanco.

El entrenador costarricense, Denis Hamlett, que dirige al Fire, anticipó que tendrá a toda su 'fuerza máxima' para el partido.

Los Tigres, dirigidos por Daniel Guzmán, tienen una motivación especial para llevarse el torneo y el botín del millón de dólares.

Los Tigres arrancaron su participación en el Torneo Apertura mexicano hace dos semanas con empate 1-1 con el Puebla y el pasado fin de semana, en la segunda jornada, derrotaron por 3-1 con gran actuación de su refuerzo Itamar Bautista a las Chivas de Guadalajara.