Nick Clegg no encuentra motivos para el bipartidismo dentro de la política europea

Valladolid.-  El diputado británico Nick Clegg, líder del Partido Liberal-Demócrata en la Cámara de los Comunes, ha recordado hoy en Valladolid cómo dentro de Europa existen muchas sensibilidades políticas y sociales al margen de la tradicional división de derechas e izquierdas, que cree debe superarse ya.

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(EFE)

El líder del Partido Liberal del Reino Unido, Nick Clegg (i), durante el encuentro que mantuvo hoy con el presidente de la Diputación vallisoletana, Ramiro Ruiz Medrano.

"Vivimos en un mundo donde la gente es cada vez más educada y está más informada gracias a internet. Tenemos que tratar de reflejar este pluralismo en la política, pensar con más imaginación porque existen más espacios y posibilidades que la derecha y la izquierda", ha reflexionado ante los periodistas.

Clegg, de 42 años y desde casi dos presidente de la tercera fuerza política en Reino Unido, ha visitado hoy la Diputación de Valladolid, ya que estos días apura sus vacaciones en la cercana población de Olmedo, donde veranea desde hace diecisiete años y procede su esposa, Miriam Gobnzález, hija del senador José Antonio González Caviedes, fallecido en 1996 en un accidente de tráfico.

Este diputado, antiguo periodista y licenciado en Arqueología, ha situado en la caída del Muro de Berlín (1989) la desaparición de la "rígida división ideológica" a que dio lugar la denominada Guerra Fría al término de la Segunda Guerra Mundial (139-1945), que fragmentó el mundo entre "capitalismo y comunismo, ricos y pobres, derecha e izquierda".

"Ahora nos encontramos en un mundo totalmente diferente, con una ideología más fluida y nuevos problemas como el terrorismo o los derivados de la identidad religiosa", ha añadido antes de criticar el férreo bipartidismo de su país, a pesar de su "antigua y honorable tradición democrática de la que nos sentimos orgullosos".

Ese sistema electoral ha relegado a su partido a la tercera fuerza en la Cámara de los Comunes -por detrás de los 352 escaños de los Laboristas de Gordon Brown y de los 194 del Partido Conservador- con un total de 63 diputados, prácticamente el diez por ciento a pesar de haber recibido la cuarta parte de los votos emitidos durante los últimos comicios.

Al analizar la crisis económica, ha observado un origen global pero una materialización concreta en cada país, de tipo financiero en el suyo y vinculado a la construcción en España, acerca de cuya situación política ha declinado realizar comentario alguno.

No obstante y de forma genérica, Clegg ha vinculado a los problemas económicos las acusaciones de falta de transparencia y de corrupción dentro de la vida política en todos los países.

"Es lógico que la gente se enfade mucho cuando su familia sufre las consecuencias económicas: ha perdido su trabajo o no puede irse de vacaciones. Entonces se tiene menos tolerancia contra la falta de transparencia. En tiempo de crisis, los políticos de todos los partidos y países deben hacer cosas modestas y con la máxima transparencia posible", ha considerado.

Por último. desde su experiencia como eurodiputado (1999-2004), Nick Clegg, se ha mostrado partidario de la adopción de medidas tendentes a reequilibrar la libertad y la responsabilidad del sistema financiero".

El líder de los liberales británicos ha achacado a la "cultura de consumo" la eliminación del riesgo que en su opinión ha desembocado en la actual crisis económica mundial.