Las familias denuncian la imposibilidad de comunicarse con los marineros del "Arctic Sea"

Moscú.-  Los familiares de los quince tripulantes rusos del "Arctic Sea", el barco mercante secuestrado en el Báltico y rescatado cerca de Cabo Verde, denunciaron hoy que las autoridades militares rusas les impiden comunicarse con los marineros.

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(EFE)

El destructor de la marina rusa "Ladny" (d) minutos antes de iniciar la maniobra de amarre en el puerto de Palmeira, en la isla de Sal (Cabo Verde) este miércoles. El buque de guerra ruso liberó cerca de Cabo Verde al carguero "Arctic Sea" de los piratas que lo secuestraron.

"A pesar de que los marineros fueron liberados y, según afirma la prensa, esperan volver a su patria, sus familias nos alertan de que ninguno de ellos ha podido comunicarse con sus prójimos", señaló el Sindicato de Marineros de Rusia (SMR) en una carta al Gobierno ruso.

La misiva subraya que, "teniendo en cuenta todo lo ocurrido y el peligro que han corrido los integrantes de la tripulación durante el secuestro del barco, sus familiares están muy preocupados por su suerte", según el texto difundido por la agencia Interfax.

Un portavoz del SMR denunció que ninguna autoridad civil o militar se ha comunicado con los familiares, que piden al menos mostrar a los marineros por televisión para confirmar que están sanos y salvos.

Mientras, la embajada de Rusia en Cabo Verde informó de que el "Arctic Sea" y el buque de guerra ruso "Ladny", que lo rescató el pasado lunes y detuvo a sus secuestradores, han llegado a la isla caboverdiana de Sal, en cuyo aeropuerto un avión espera a los marineros para llevarlos a Rusia.

Sin embargo, fuentes militares revelaron a Interfax de que en la isla ya se encuentra un equipo de jueces de instrucción de la Fiscalía rusa, que procederán a interrogar a los marineros dentro del caso penal incoado a raíz del secuestro.

Según las fuentes, los interrogatorios podrían prolongarse un par de días, tras lo cual los marineros y los ocho secuestradores detenidos serán trasladados a Moscú en un avión militar de transporte del Ministerio de Defensa de Rusia.

Esa cartera afirmó hoy que, según informaron los tripulantes en los primeros interrogatorios, los secuestradores efectivamente exigían rescate, amenazando con volar y hundir el barco mercante.

Los secuestradores, siempre según fuentes militares rusas, arrojaron sus armas al mar cuando el "Arctic Sea" fue alcanzado por el buque de guerra ruso.

El "Arctic Sea", propiedad de una compañía finlandesa y con bandera maltesa, navegaba con un cargamento de madera desde Finlandia hacia el puerto argelino de Bejaia, a donde debía llegar el 4 de agosto a través de Gibraltar, pero la comunicación con él se perdió el 28 de julio.

Sólo a principios de agosto, según la versión ofrecida hasta ahora, se supo por sus propietarios y otras fuentes que, cuatro días antes de desaparecer, el barco fue abordado y secuestrado cerca de una isla sueca en el Báltico por unos desconocidos, que se acercaron en una lancha.

Asimismo, autoridades de varios países revelaron estos días que el "Arctic Sea" no estuvo en paradero desconocido, sino que se decidió ocultar la información real para no poner en riesgo la vida de los tripulantes y la integridad de la propia nave.

El ministro de Defensa ruso, Anatoli Serdiukov, al anunciar el lunes el rescate del barco mercante, afirmó que éste no había sido secuestrado, pero el martes se desdijo de sus propias palabras al asegurar que sí hubo "un acto de piratería".

Según Serdiukov, el "Arctic sea" fue secuestrado por ocho piratas de origen estonio, letón y ruso, que fueron detenidos.

La enigmática desaparición del barco mercante y su igual de misteriosa recuperación han suscitado en la prensa sospechas de que transportaba en secreto armas o materiales radiactivos y que se vio implicado en una operación de servicios secretos de varios países.