Ucrania dice que Estados Unidos no le ha propuesto emplazar radares en su territorio

Kiev/Moscú.-  El presidente ucraniano, Víctor Yúschenko, afirmó hoy que Ucrania no ha recibido propuestas de Estados Unidos para emplazar en su territorio radares del nuevo escudo antimisiles norteamericano, posibilidad que alarmó a Rusia.

ampliar foto

(EFE)

El presidente ucraniano, Víctor Yúschenko. EFE/Archivo

"No quiero alborotos. Ucrania no ha recibido ninguna propuesta de EEUU para ubicar en su territorio radares para la nueva arquitectura de la defensa antimisiles en Europa", dijo Yúschenko a la prensa en Moldavia tras una cumbre de la comunidad postsoviética.

Medios norteamericanos informaron de que el subsecretario de Defensa estadounidense, Alexander Vershbow, incluyó a Ucrania en la lista de países donde podrían instalarse radares del nuevo escudo antimisiles, que EEUU propone desarrollar junto a la OTAN y Rusia.

Aunque en esta lista ya figuran el radar ruso de Armavir y el azerbaiyano de Gabalá, que Rusia misma propuso a EEUU emplear conjuntamente, la noticia ha suscitado preocupación en Moscú.

Vladímir Jandoguiy, quien fue hasta hoy el jefe de la diplomacia ucraniana en funciones, confirmó por su parte que "el ministerio de Exteriores no dispone de información oficial relativa a la declaración de Vershbow".

Petró Poroshenko, aprobado hoy como nuevo titular de Exteriores, opinó que el emplazamiento de elementos del escudo norteamericano en Ucrania sería "anticonstitucional", según la agencia Interfax-Ucrania.

"La constitución de Ucrania no permite la existencia en su territorio de bases o fuerzas armadas de otros estados, y esto es extensivo a la cooperación en la defensa contra misiles. Creo que seria anticonstitucional", señaló Poroshenko.

El jefe del comité parlamentario de Seguridad Nacional, Anatoli Hritsenko, opinó que tal cooperación sería útil para el país y para Europa, y precisó que EEUU, a todas luces, no planea emplazar en Ucrania radares propios, sino incluir los ucranianos en su sistema.

Hritsenko, ex ministro de Defensa, recordó que Rusia renunció este año al alquiler de los radares ucranianos de alerta temprana sobre ataques con misiles en Mukachevo y Sebastópol, que podrían ser integrados en el nuevo escudo paneuropeo de la OTAN y EEUU.

Mientras, el jefe de la diplomacia rusa, Serguéi Lavrov, señaló que la declaración de Vershbow es "extravagante e inesperada" y "suscita más preguntas que respuestas".

"Queremos obtener absoluta claridad de nuestros socios americanos sobre la visión que tienen del nuevo esquema que han ideado en vez del tercer sector posicional", que preveía emplazar elementos del escudo en Polonia y la República Checa, indicó Lavrov.

Rusia, opuesta desde el principio a este proyecto inicial de EEUU, ahora rechazado, se alarmó por la posibilidad de que los radares y antimisiles finalmente acaben más cerca de sus fronteras que según el primer plan, como en Ucrania y Georgia,

Pero Víctor Yesin, ex jefe del estado mayor de las Fuerzas de Misiles Estratégicos rusas, consideró que tal arquitectura del escudo paneuropeo no supondrá una amenaza para Rusia si ésta participa en su construcción junto a la OTAN y EEUU.

La Cancillería rusa informó hoy de que Rusia y EEUU celebrarán consultas sobre la configuración del nuevo escudo antimisiles norteamericano el 12 de octubre en Moscú, en la víspera de la visita de la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton.

La delegación rusa estará encabezada por el viceministro de Exteriores, Serguéi Riabkov, y la estadounidense por Hellen Tosher, subsecretaria de Estado para control de armas y seguridad internacional.

Al respecto la revista norteamericana "Defence News" afirmó que Tosher planteará en Moscú la posibilidad de crear un sistema único que integre radares emplazados en Rusia y en otros países de la comunidad pos-soviética.

La revista recordó que Rusia misma había propuesto a EEUU en 2007 crear tal "espacio único de radares", pero la idea fue rechazada por la anterior Administración norteamericana del presidente George W. Bush.

Clinton durante su primera visita a Rusia (12-14 de octubre) abordará, entre otros asuntos, el escudo antimisiles, la marcha de las negociaciones para la firma de un nuevo acuerdo de desarme y las crisis nucleares en Irán y Corea del Norte.