La Alta comisionada, consternada por la nueva ejecución de un menor en Irán

Ginebra.-  La Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navi Pillay, dijo hoy estar profundamente consternada por la ejecución de un menor en Irán el pasado domingo, y pidió a ese país que cambie sus leyes y prácticas y "termine de una vez por todas con la ejecución de menores".

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(EFE)

La Alta Comisionada para Derechos Humanos de la ONU, Navanethem "Navi" Pillay. EFE/Archivo

También expresó su grave preocupación por las tres sentencias de muerte dictadas recientemente contra sendos individuos por estar involucrados en las protestas que tuvieron lugar en el país después de las elecciones presidenciales.

Behnoud Shojaie, que fue ejecutado el domingo, había sido condenado por el asesinato de otro chico en una pelea callejera, ocurrida cuando ambos tenían 17 años.

Tanto Pillay como varios relatores de la ONU se habían entrevistado con las autoridades iraníes acerca de este caso y les habían recordado la obligación internacional de no ejecutar a personas que cometieron los crímenes cuando eran menores.

La Alta Comisionada recordó que Irán es parte de la Convención de los derechos de los Niños, y de la Convención de derechos Civiles, dos legislaciones que prohíben la pena de muerte contra los menores.

"Esta última ejecución muestra que no hay garantías de clemencia para los jóvenes hasta que Irán no cambie su ley y sus prácticas para acabar con estas ejecuciones", dijo Pillay.

"Es la responsabilidad del Estado poner fina estas ejecuciones, no una prerrogativa de la familia", añadió, en referencia a que se le había dado a la familia de la víctima la posibilidad de llegar a un acuerdo monetario a cambio de no exigir la ejecución del culpable.

Acerca de las tres nuevas sentencias a muerte por los disturbios que siguieron a la elección presidencial, Pillay señaló que "bajo la legislación internacional, la pena capital sólo puede ser aplicada cuando se dan unas condiciones muy estrictas, por ejemplo, sólo respecto a los más graves crímenes y después de juicios escrupulosamente justos".

Y recordó que los mecanismos de derechos humanos de la ONU mantienen la opinión de que la imposición de la pena de muerte para crímenes que no resultan en la pérdida de vidas es contraria a la legislación internacional.

"Y también hay una gran preocupación acerca de cómo se desarrollaron los juicios de activistas de la oposición. Espero que esos juicios sean revisados cuidadosamente por tribunales superiores", agregó.

No obstante todos los argumentos, Pillay subrayó que ella se opone a la pena de muerte en cualquier circunstancia.