Un Premio Nobel encabeza una candidatura a las elecciones europeas

Se acercan las elecciones al Parlamento Europeo, sin que por el momento la campaña haya iniciado pasos sustanciales en España. En otros países ya han comenzado los primeros trámites legales, y, en concreto, en Alemania ya se han proclamado las candidaturas que han recolectado el número de firmas requeridas para poder presentarse. En total, 32 partidos.

Europa-Democracia-Esperanto

Además de los partidos tradicionales, pueden encontrarse otros menos conocidos, algunos extremistas (entre ellos, un par de ellos con posiciones cercanas a los neonazis) y varios que defienden campañas específicas, desde el Partido Pirata hasta uno con postulados espiritistas.

Entre estas formaciones peculiares algunos medios han incluido un partido que ya hace cuatro años se presentó en Francia, que este año lo hará también en Alemania, y que ha manifestado la intención de hacerlo en el futuro en el resto de países. Se trata de Europa-Democracia-Esperanto (EDE). En principio podría parecer una formación centrada en un punto específico, la promoción del idioma esperanto, pero según sus iniciadores, se trata de emplear esa lengua como un símbolo de promoción de la idea europea, corrigiendo algunos de los rasgos negativos de la actual construcción de la UE, entre los cuales el dominio de unas culturas sobre otras.

Que no se trata de un partido con vocación marginal lo prueba que la candidatura de EDE en Alemania será encabezada por todo un Premio Nobel, Reinhard Selten. Selten recibió el galardón en Ciencias Económicas en honor de Nobel en 1994, junto con John Nash (el de Una mente maravillosa) y John Harsanyi por sus trabajos en la Teoría de Juegos. Es un esperantista conocido, y hace unos meses ya manifestó su apoyo al uso del esperanto en las instituciones europeas en una recepción oficial en el Parlamento con ocasión del Día de Europa.

La presentación de una partido que hace bandera del esperanto ha sido criticada por una importante parte de los partidarios de este idioma. Argumentan, correctamente, que el esperantismo es un movimiento muy plural, y que una identificación del idioma con un partido determinado puede comprometer la imagen del esperanto en su conjunto.

Entre los críticos del partido se encuentra Hèctor Alòs, ex secretario de la Asociación Catalana de Esperanto, que se interroga si el programa del partido puede acomodar esa diversidad: "si se quiere aparecer en la arena política, es necesario poseer un programa concreto, incluso si se refiere sólo a las lenguas; al menos en este aspecto se necesita esa concreción para discutir con otros grupos de manera seria".

Los impulsores del partido manifiestan sin embargo la importancia del esperanto, como instrumento y como símbolo de la construcción europea, y como herramienta de defensa de los derechos humanos. Su programa afirma: "Queremos una ciudadanía europea sin hegemonías. Que cada uno pueda seguir fomentando su propia lengua sin obstáculos económicos, políticos ni culturales". Otros elementos del programa quedan más abiertos, con la esperanza de que este irá evolucionando con la consolidación del partido.

Se trata del mismo dilema que en su día encontraron los primeros partidos verdes. ¿Es mejor presentar las reivindicaciones ecologistas como eje del programa de un movimiento específico, aun dejando ciertos elementos en la penumbra, o es preferible luchar por que las reivindicaciones concretas aparezcan en el seno de los partidos mayoritarios? El éxito de tales partidos ecologistas en varios países, y especialmente en Alemania, junto con el hecho de que la agenda ecologista se haya incorporado a los programas del resto de partidos políticos, han empujado a los promotores del partido a emprender un camino similar.

El partido quiere aprovechar el altavoz de las elecciones parlamentarias para promocionar las causas que defiende, y específicamente el esperanto. El relativo éxito informativo de la formación cuando se presentó en las anteriores elecciones europeas en Francia, donde recibió algo más de 25.000 votos, le han llevado a una campaña de expansión a otros países. Aunque existen filiales en otros países europeos, en la mayoría de los casos, como España, sólo de forma embrionaria. Como consecuencia,  se ha optado por concretar por el momento la presentación en 2009 únicamente en Francia y Alemania.

E-D-E no es el único partido que defiende el papel del esperanto en Europa. Parlamentarios de otros partidos de tendencias muy diversas han presentado durante los últimos años proposiciones para incrementar el papel de esta lengua en las instituciones de Bruselas y Estrasburgo, como ya hemos informado en Soitu. Por el momento el éxito ha sido muy escaso, dado el poco interés de las potencias grandes y de los dirigentes de la Comisión Europea en romper el statu quo lingüístico. Los dirigentes del nuevo partido apuestan por que su presentación sirva para elevar la conciencia sobre un problema que, a su entender, simboliza gran parte de los males de la organización actual de la política europea.