Boné quiere cambiar el sistema de ejecución de las obras de interés general

Zaragoza.-  El consejero de Medio Ambiente, Alfredo Boné, censuró hoy el "históricamente muy bajo" ritmo de ejecución de los compromisos del Estado con Aragón y apostó por cambiar el sistema de desarrollo de las obras de interés general, desde la idea de que el Ejecutivo aragonés sería capaz de acelerar significativamente las obras.

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(EFE)

El consejero de Medio Ambiente de Aragón, Alfredo Boné, durante su intervención ante el Parlamento de Renania del Norte-Westfalia, en Alemania.

Boné se muestra más preocupado por el retraso y por la escasa ejecución de las obras del Ministerio de Medio Ambiente que por el presupuesto que prevé este ministerio para la Comunidad en los Presupuestos Generales del Estado 2008, que asciende a 214,2 millones de euros (130,97 del propio Ministerio y 83,2 de Aguas de la Cuenca del Ebro SA).

El consejero compareció hoy ante la Comisión de Medio Ambiente de las Cortes de Aragón para informar sobre los PGE de Medio Ambiente y sus repercusiones en Aragón a petición del PP, cuyo portavoz, Eloy Suárez, denunció que las cifras previstas constatan que "no hay voluntad de desarrollar las infraestructuras hidráulicas" que necesita Aragón.

Alfredo Boné reconoció que cualquier cifra de inversión le parecería insuficiente, igual que le parecían cuando en Madrid gobernaba el Partido Popular, aunque insistió en que "la clave" está en las "ejecuciones", o más bien en las "inejecuciones", ironizó.

En este sentido, dijo que sólo se ha ejecutado el 31 por ciento de los 2.450 millones de euros de presupuesto de las obras del Pacto del Agua, que corresponde al 35,97% de las actuaciones, con un ritmo medio anual del 2,05 por ciento del total de la inversión prevista entre los años 2004 y 2007 y del 2,48% entre 1996 y 2003.

Enfatizó que a este ritmo se necesitarían cincuenta años para acabar todas las actuaciones previstas.

En cuanto a ACESA, detalló que el nivel de ejecución de los presupuestos que destinó a Aragón entre 2004 y 2007 se sitúa en el 12,5 por ciento, y en el 12,13% en el periodo 1998-2003, por lo que ninguno de los partidos que ha tenido responsabilidades en el Gobierno de España está en condiciones de reclamar "nada", dijo al PP.

"Me parece lamentable", incidió Boné, quien insistió en que si Aragón pudiera disponer del dinero, la ejecución al cien por cien estaría garantizada.

Por primera vez en la historia, sin embargo, hay una ministra, Cristina Narbona, dispuesta a firmar un convenio para que las obras de interés general en la Comunidad, como las depuradoras de los ríos pirenaicos, las gestione el Gobierno autónomo.

Boné arremetió además contra los populares a cuenta de las voces que desde el Partido Popular de España y de las comunidades del Levante siguen pidiendo el trasvase del Ebro.

Par el consejero, un partido que lleve este proyecto es su programa electoral no tendrá "nada que hacer" con el PAR, porque el trasvase del Ebro es "la mayor amenaza" a la que se enfrenta Aragón y ante la que pidió a las fuerzas aragonesas que se unan "sin fisuras" y adopten una posición "clarísima".

En este asunto es donde se evidencia, lamentó, la diferente actitud del PP según esté en Aragón o en el resto de España, y por ello agradeció los gestos en contra de la transferencia de caudales de los populares aragoneses.

Por su parte, Eloy Suárez achacó toda la responsabilidad en los retrasos en la ejecución de las obras hidráulica a la ministra, de quien dijo que es "el azote" de Aragón y que ha engañado a sus habitantes.

Explicó que aunque Narbona se comprometió a aportar 371 millones para el ciclo integral del agua en ocho años (lo que supondría 46,3 millones al año), en los PGE para 2008 solo aparecen 30, lo que calificó de "auténtica tomadura de pelo".

El consejero explicó a este respecto que la cantidad comprometida no se divide a partes iguales y precisó que el PSOE ha presentado una enmienda a los presupuestos para que esta cantidad ascienda hasta los 60 millones de euros.

Por CHA, Bizén Fuster calificó el debate de "esperpéntico" toda vez que el contenido de los PGE queda fuera del control de las Cortes y dudó de que todo se circunscriba al grado de ejecución de las partidas, porque sin consignación seguro que no hay ejecución.