Detectan el aumento del consumo de alcohol y cannabis en los jóvenes y un descenso del tabaco

Valencia.-  Los responsables de los diferentes programas de drogodependencias puestos en marcha en la Comunitat Valenciana han detectado un aumento del consumo de alcohol y cannabis entre los jóvenes valencianos, al tiempo que se produce un descenso de los fumadores de tabaco.

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(EFE)

Un joven fuma marihuana (cannabis) en Valencia.

Así lo han dado a conocer hoy la concejal de Sanidad de Valencia, Lourdes Bernal, la directora general de Drogodependencias, Sofía Tomás, y el director de la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción (FAD), Ignacio Calderón, en la presentación de una jornada sobre drogodependencias dedicada a la relación entre la educación y las adicciones.

Calderón ha señalado que este incremento en el consumo de marihuana se debe a la percepción que tienen los jóvenes de que esta sustancia procede de una planta y es un producto natural, y por lo tanto no perjudicial, mientras que el tabaco contiene sustancias químicas y es considerado más peligroso para la salud.

Según los datos de la última encuesta realizada a escolares de entre 13 y 18 años, un 40% de los jóvenes afirma haber probado el alcohol, mientras que un 33% dice consumirlo de vez en cuando, frente a un 26 por ciento que no lo ha probado, cifras entre un 3 y un 5 por ciento superiores al curso 2005/2006.

Asimismo, un 28% de los alumnos declara haber probado el tabaco y sólo un 7% dice fumar de vez en cuando, mientras que con el cannabis el 15% lo ha probado y el 6% lo consume de vez en cuando, un cinco por ciento más que el curso anterior.

Calderón ha destacado que aunque las cifras son preocupantes, es necesario tener en cuenta que, salvo en el caso del alcohol, el número de menores que no consume este tipo de sustancias es superior a quienes sí lo hacen, ya que un 58 por ciento nunca ha probado el tabaco y un 76 por ciento no ha probado el cannabis.

Ha destacado que mientras antiguamente las drogas marginaban a quienes las consumían porque producían unos efectos claros sobre la salud, ahora se perciben como integradoras, ya que no producen problemas sanitarios tan visibles o inmediatos.

Sin embargo, ha alertado de que existen otras consecuencias provocadas por el consumo de estas sustancias que afectan a la conducta y a la personalidad, como las relacionadas con el fracaso escolar, que derivan en problemas laborales y sociales futuros.

Todos los presentes han coincidido en destacar la importancia de la educación para transmitir a los jóvenes unas capacidades personales y un autocontrol que les permita afrontar la vida, al tiempo que han señalado que no se trata de un asunto sólo de la escuela, sino que necesita la implicación de toda la sociedad.