El gobierno peruano "no se quedará de brazos cruzados" tras el atentado

Lima.-  El Gobierno peruano "no se quedará de brazos cruzados" y responderá "con todas las armas legales" al atentado que dejó dos policías muertos y uno herido en la región Ayacucho, declaró hoy el ministro de la Producción, Rafael Rey.

El funcionario expresó en Palacio de Gobierno, a nombre de todo el gabinete, las condolencias a las familias de los policías muertos hoy en la provincia de Huanta, a consecuencia de un atentado presuntamente cometido por terroristas o sicarios del narcotráfico.

"Que no le quede duda a ninguno de los peruanos que el Gobierno va a responder con todas las armas legales que tiene y con todo el deber que tiene de proteger a los ciudadanos y sus derechos humanos, incluyendo el de los policías y huérfanos", manifestó Rey a los periodistas.

Una veintena de desconocidos armados con fusiles de largo alcance lanzó desde un camión una granada de guerra a un vehículo policial en la localidad de Santa Rosa de Occaña, a unos cinco kilómetros de la provincia de Huanta, dijo el director general de la Policía Nacional, David Rodríguez.

Los suboficiales Alberto Quispe Arboledo y Julio César Solano Cipriano murieron tras la explosión, mientras que Elías Pahuacho Córdova resultó herido por esquirlas en la pierna y el brazo, aunque está fuera de peligro, indicó el jefe de la Policía a Radio Programas del Perú (RPP).

Horas después del ataque, la policía inició las labores de búsqueda de los asaltantes y la fiscalía abrió las investigaciones respectivas.

El ministro de la Producción indicó que el Gobierno "va a seguir respondiendo con mayor eficacia a estas acciones claramente terroristas y subversivas".

Por su parte, monseñor Luis Bambarén, quien fue presidente de la Conferencia Episcopal Peruana, declaró a la agencia estatal Andina que se trataba de un atentado "malvado y cobarde".

"No les ha importado la Navidad a estos malvados que van sembrando la muerte, con la cobardía de un ataque sorpresivo, porque ni siquiera se enfrentan frente a frente", agregó.

El obispo emérito de la ciudad de Chimbote dijo que durante la Segunda Guerra Mundial las fuerzas enfrentadas cumplían con una tregua en estas fechas de Navidad.

"Sin embargo, estos cobardes que andan sembrando la muerte, no han aprendido que el Perú se desangró durante 20 años y dejó tantas víctimas", indicó.

El conflicto interno desatado por la banda armada Sendero Luminoso en 1980 dejó alrededor de 70.000 muertos hasta el año 2000, según el informe de la Comisión de la Verdad y Reconciliación (CVR).

El lugar donde ocurrió el atentado forma parte del Valle del Río Apurímac y Ene (VRAE), que abarca los departamentos de Ayacucho, Junín y parte de la Amazonía, y es una de las principales zonas de cultivo de hoja de coca y de producción de cocaína en Perú.

Además, en el VRAE se desplazan remanentes de la banda maoísta Sendero Luminoso, que desconocieron el cese al fuego ordenado por su fundador y líder, Abimael Guzmán, tras su captura en 1992.

En la madrugada del 1 de noviembre, un policía murió en el ataque que perpetró un grupo de presuntos narcoterroristas fuertemente armados contra la comisaría de Ocobamba, en el departamento de Apurímac, colindante con Ayacucho.