El Gobierno de Ecuador y la oposición miden fuerzas en la sede de la Constituyente

Quito.-  El Gobierno y la oposición de Ecuador se aprestan a medir fuerzas en la localidad costera de Montecristi, la sede de la Asamblea Constituyente, que estudia una polémica reforma tributaria impulsada por el presidente Rafael Correa.

ampliar foto

Cientos de simpatizantes de Correa llegaron el miércoles a Montecristi, para defender el proyecto del Gobierno y la Constituyente, como se los pidió el mandatario.

Correa, justamente, acudió el miércoles a Montecristi y encabezó una concentración en la que volvió a criticar a la oposición y a los medios de comunicación que, según su criterio, responden a intereses de grupos poderosos.

Después de la concentración, decenas de simpatizantes del gobierno se apostaron en las calles de Montecristi en una "vigilia", ante la amenaza de varios políticos opositores de protestar en ese lugar contra la reforma tributaria.

Asimismo, Correa se reunió con los asambleístas, sobre todo con los de su grupo político, Alianza País, que controla la Constituyente, pues ocupa 80 de los 130 escaños que conforman el foro.

El jefe del Estado, tras cumplir esas actividades en Montecristi volvió a Quito.

Por su parte, el alcalde de Guayaquil, el conservador Jaime Nebot, cabeza visible de la oposición, dirige hoy mismo una caravana de un medio centenar de autobuses, que transportan a cientos de sus simpatizantes a Montecristi.

Aunque las fuerzas del orden han intentado impedir la salida de los autobuses de Guayaquil, Nebot, tras reclamar la vigencia en el país del "libre tránsito de personas", aseguró que su movilización intenta "defender a todos los ecuatorianos" de la reforma tributaria, a la que considera perjudicial para el país.

Nebot recordó que la Asociación de Municipalidades del Ecuador (AME) convocó a una reunión de los 219 alcaldes del país a la ciudad costera de Manta, vecina de Montecristi, para analizar la reforma tributaria.

El alcalde de Guayaquil remarcó que la movilización es un derecho ciudadano y aseguró que si se presentan hechos violentos, ellos no surgirán de sus simpatizantes.

De su lado, el presidente de la Asamblea Constituyente, Alberto Acosta, dijo que espera que no se produzcan enfrentamientos entre los partidarios del Gobierno y de la oposición.

Acosta dijo que una trifulca en Montecristi haría daño al país, aunque señaló que la Asamblea atenderá a todos los sectores que pretendan presentar propuestas para la elaboración de la nueva Carta Magna o de cambios en la estructura institucional del país, que lleva adelante la Constituyente.

El jefe de la Asamblea, no obstante, dijo que esa institución no acepta amenazas o "bravatas" de grupos que intenten "impedir que el país avance".