Clinton cree que la victoria en N.York muestra el interés de EE.UU. en un presidente preparado

Nueva York.-  La senadora Hillary Rodham Clinton, aspirante demócrata a la Casa Blanca, expresó hoy su satisfacción por la victoria que obtuvo en las primarias de Nueva York y subrayó que eso demuestra que los estadounidenses quieren un "presidente preparado desde el primer día" de su mandato.

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(EFE)

La senadora por Nueva York y pre candidata demócrata a la presidencia de Estados Unidos Hillary Clinton señala a sus seguidores durante su acto principal de noche de elecciones primarias hoy,en Nueva York (EEUU), en el marco del 'Super martes', una jornada en la que 24 estados votan por sus aspirantes a la Casa Blanca.

"Esta es nuestra noche, esta es la noche de Estados Unidos", dijo la senadora en las instalaciones habilitadas en pleno centro de Manhattan para vivir la noche electoral del "supermartes", mientras sus seguidores, entusiasmados, gritaban su nombre y portaban pancartas azules con la leyenda "Hillary, presidenta".

Además de Nueva York, su estado adoptivo y por el que es senadora, Hillary ha ganado, por ahora, las primarias de Nueva Jersey, Arkansas, Oklahoma, Tennessee y Masachusetts, un estado que es feudo del clan Kennedy, que dio su apoyo al senador de Illinois Barack Obama frente a la ex primera dama de EE.UU.

Clinton no se olvidó de felicitar a Obama, el demócrata que más dura batalla le ha presentado en la carrera electoral por la designación como candidato del Partido en la Convención Nacional Demócrata que se celebrará del 25 al 28 de agosto en Denver (Colorado).

"Quiero felicitar al senador Obama por su victoria de esta noche", dijo Hillary, quien aseguró que ya tiene la mente puesta en los próximos debates y en el resto de la campaña electoral "sobre cómo hacer de éste un país mejor para la próxima generación, porque ese es el trabajo de mi vida".

Vestida con chaqueta amarilla y pantalón negro, la ex primera dama no mostró rastro de la afonía que ha sufrido en las últimas horas y de la que ya explicó que no era por la campaña, sino de sus gritos de animación al equipo de fútbol americano de los Gigantes de Nueva York, vencedores el domingo en la Super Bowl.

La mujer que aspira a ser la primera presidenta de EE.UU. aseguró también que en las votaciones primarias celebradas hoy en 24 estados del país, "se han oído las voces de todos los estadounidenses, de todas las edades, de todas las razas, de cualquier fe y modo de vida".

Clinton se impuso a Obama sin problemas en Nueva York, con el 57 por ciento de las preferencias, lo que le supone sumarse buena parte de los 281 delegados del Partido Demócrata de cara a la designación de candidatos.

La victoria de Clinton en Nueva York supone para ella pasar una prueba de fuego, ya que en este estado -uno de los más poblados del país, con 19 millones de votantes- Obama le presentó dura batalla en los extremos sociales, como son los barrios de afroamericanos y de los más liberales y con mayor poder adquisitivo.

Muchos votantes entrevistados por las televisiones locales vieron en Clinton a la más preparada para dirigir este país, aunque muchos otros señalaron a Obama como el político que mejor puede liderar un cambio en EE.UU.

En su discurso de agradecimiento, pronunciado poco antes del cierre de las urnas en California, en el oeste del país y como Nueva York, considerado un estado clave por la importancia de su población y del electorado hispano, Hillary se refirió al apoyo de su marido, el ex presidente Bill Clinton, y de su hija, Chelsea.

De ellos dijo que "son las personas más importantes de mi vida", sin olvidar a su madre, "que nació cuando las mujeres de este país no podían votar y que me ha apoyado siempre".

Clinton no perdió la oportunidad de criticar la Administración del presidente George W. Bush, de quien dijo que "ya se han visto sus reacciones en siete años", y agregó: "ya se ha visto que quieren (los votantes) en la presidencia a alguien preparado desde el día uno".

"Veo un Estados Unidos donde nuestra economía funcione para todos, no para unos pocos, donde se creen buenos trabajos. Un EE.UU. donde no sólo demos cuidado médico a alguna gente, sino a todos y cada uno de los ciudadanos, un EE.UU. en que cuando los jóvenes se comprometan a defender el país, nosotros nos comprometamos a salvarlos a ellos", señaló.

En su discurso aprovechó también para dar un repaso crítico a algunos de los elementos más denostados de la presidencia de Bush, y así señaló que el país que quiere dirigir es uno en el que "nos enfrentemos a las grandes petroleras y llevemos a cabo una revolución de energías limpias" para controlar "la crisis del cambio climático".