Cancilleres apoyan proceso de paz y rechazan la "ocupación extranjera ilegal" en Oriente Medio

Buenos Aires.-  Los cancilleres árabes y suramericanos reunidos en Buenos Aires llamaron hoy a "intensificar esfuerzos" para solucionar el conflicto árabe-israelí, rechazaron "la ocupación extranjera ilegal" en Oriente Medio y condenaron el "terrorismo en todas sus formas y manifestaciones".

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Así quedó plasmado en el documento final de la reunión de cancilleres de América del Sur-Países Árabes, que concluyó hoy tras dos días de deliberaciones en la capital de Argentina.

Los representantes de los 34 países que asistieron al encuentro advirtieron que rechazan "cualquier vinculación entre el terrorismo y un pueblo o religión, grupo étnico o cultura específicos".

La "Declaración de Buenos Aires" incluye asimismo un "fuerte respaldo al multilateralismo y a los principios establecidos en la Carta de las Naciones Unidas", así como un llamamiento a efectuar una "reforma integral" en la ONU.

En otro de los puntos del documento, los cancilleres "reafirman su rechazo a la ocupación extranjera ilegal y reconocen el derecho de los Estados y pueblos a resistir a la ocupación extranjera, de acuerdo con los principios de la legalidad internacional".

El párrafo, según explicó en una rueda de prensa el secretario general de la Liga Árabe, Amr Moussa, se refiere "a la ocupación israelí" de los territorios palestinos.

La declaración también expresa "la necesidad de intensificar los esfuerzos existentes para reanudar el proceso de paz con el objeto de lograr una paz justa, verdadera y abarcadora para el conflicto árabe-israelí en todos sus aspectos".

La declaración avala resoluciones internacionales tendentes "al retiro de Israel de todos los territorios árabes ocupados" y "el establecimiento de un Estado palestino independiente, coexistiendo pacíficamente junto al Estado de Israel".

Tras hacer un "llamamiento a un cese inmediato de todos los actos de violencia" en esa región, los cancilleres expresaron su "profunda preocupación por la situación en (la Franja de) Gaza" y pidieron "la reapertura inmediata de los pasos entre Gaza e Israel".

En otro orden, convocaron "a todos los partidos políticos libaneses para que se unan y reanuden el diálogo y aseguren la paz y la estabilidad en Líbano".

También reafirmaron "la necesidad de brindar apoyo político y económico al gobierno y pueblo del Líbano con la finalidad de preservar su independencia, soberanía e integridad territorial".

Además, mostraron su preocupación por "las sanciones unilaterales impuestas a Siria por el gobierno de los Estados Unidos", que a su juicio constituyen "un grave precedente en las relaciones entre los Estados independientes".

En cuanto a la situación de Iraq, el documento alude escuetamente a la "necesidad de unidad, libertad, soberanía e independencia" de ese país "y el derecho a la no injerencia en sus asuntos internos".

Sin mencionar a Irán, la declaración habla de "la importancia de la coordinación en los foros multilaterales de desarme, a fin de promover posiciones comunes con relación al progreso de la comunidad internacional hacia el desarme nuclear total".

En otro punto, insta a "Irán a dar una respuesta positiva a la iniciativa de los Emiratos Árabes Unidos para llegar a una solución pacífica sobre la cuestión de las islas Tunb Al-Kubra, Tung Alsughra y Abou Moussa a través del diálogo y de negociaciones directas".