La primera Unidad de Conductas Adictivas de Galicia abre con 5.500 pacientes

Ourense.-  La primera Unidad de Conductas Adictivas de Galicia ha abierto hoy sus puertas en Ourense y unifica, en el edificio del hospital Santa María Nai, el diagnóstico y tratamiento de al menos, 5.500 personas con adicciones, que pasan al sistema público de salud, explicó el director general de Salud Mental de la Xunta, Víctor Pedreira.

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(EFE)

El director general de Salud Mental y Drogodependencias Víctor Pedreira (1d), el director provincial del Servicio Galego de Salud (Sergas) David Simón Lorda (2d), el gerente del Complejo Hospitalario de Ourense, José Luis Jiménez (2d), y el delegado en Ourense de la consellería de Sanidad, Juan José Monedero, en la entrada de la primera Unidad de Conductas Adictivas de Galicia, que ha sido inaugurada hoy en Ourense.

Pedreira explicó que el Servicio Galego de Saúde proyecta, para 2009, la integración administrativa de los colectivos gallegos que tratan el tabaquismo, alcoholismo, drogodependencias y conductas adictivas como la ludopatía y dependencias a compras, teléfono móvil o internet, pero en el caso de Ourense se adelantó el proceso "porque hubo un acuerdo rápido entre los implicados", subrayó.

La integración en el sistema público de salud de las adicciones, según Pedreira, responde a estudios científicos que muestran que todos los adictos tienen una enfermedad común y su tratamiento es similar.

Además, según el director general, el consumo de drogas cambió y frente al antiguo perfil de consumo de heroína por parte de personas marginadas y con problemas policiales, ahora hay un mayor consumo de esta droga por parte de personas integradas social, familiar y laboralmente durante muchos años, "por lo que eran reticentes a acudir a entidades relacionadas con la marginalidad social".

"Eso nos hizo pensar -añadió- en la necesidad de ofrecer a los adictos atención sanitaria en el sistema público, como a cualquier otro paciente y en una instalación común, para reunir los recursos que estaban dispersos".

Así, la Unidad de Conductas Adictivas surgió, según dijo, del acuerdo entre la asociación As Burgas -que trata alcoholismo y ludopatía-, el Ayuntamiento -que trata la drogadicción- y el Complejo Hospitalario de Ourense (CHOU), con su unidad mental cuyo "rápido resultado" permite ganar un año en el proceso previsto y donde se ofrecerán tratamientos diferenciados.

El proceso será similar en el resto de Galicia, según dijo, y en Ourense se complementará, en breve, con una ampliación en el número de camas de psiquiatría, para "poder ingresar a los pacientes que necesitan desintoxicación sanitaria y que hasta ahora debían marcharse a otras áreas sanitarias para hacerlo, como a Ferrol".

La unidad ocupa 530 metros cuadrados destinados antes a las urgencias del hospital Santa María Nai en el CHOU, que está dirigida por Gerardo Florez y cuenta con 18 profesionales sanitarios y sociales para atender las 5.500 historias clínicas reunidas de los colectivos que se ocupaban antes de los tratamientos y, previsiblemente, según dijo, de otros 600 pacientes nuevos al año.

Por las tardes, se atenderán los casos que afecten a menores, para poder compaginar su diagnóstico y tratamiento con el horario escolar y para facilitar las terapias familiares, según Florez.

En relación a otras adicciones, el director explicó que las demandas provienen en su mayor parte de consumidores de heroína, cocaína y cannabis y en ludópatas y alcohólicos "mientras que en otras como adicción a internet, a las compras o a la telefonía móvil apenas tenemos casos", agregó.

Florez espera que la integración en el sistema público haga aumentar la demanda, "que es del 95 por ciento entre los consumidores de heroína, mientras que sólo mitad de los cocainómanos y demás adictos pide atención sanitaria.