El Gobierno valenciano celebra un dictamen que cataloga como trasvase el envío de agua a Barcelona

Valencia.-  El vicepresidente primero del Consell, Vicente Rambla, ha celebrado hoy el dictamen del Consell Jurídic Consultiu (CJC) de la Comunitat Valenciana en el que concluye que las transferencias hídricas del río Ebro a Barcelona para paliar la sequía de esta zona, constituyen "un trasvase".

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(EFE)

El vicepresidente primero y portavoz del Consell, Vicente Rambla, durante la rueda de prensa en la que ha informado de los acuerdos tomados por el Gobierno de la Generalitat en su sesión plenaria semanal.

El dictamen, que ha sido hecho público hoy por Rambla en la rueda de prensa posterior al pleno del Consell, ha sido emitido a petición del Gobierno valenciano y cuenta con el voto particular negativo del consejero Vicente Cuñat Edo.

El texto defiende que la nueva infraestructura de conexión "no puede sino constituir una prolongación del trasvase inicialmente proyectado desde el delta del Ebro hasta Tarragona".

El dictamen también argumenta que otro hecho que acredita que "nos encontramos ante una transferencia de recursos hídricos, mediante la infraestructura del trasvase", es que el agua "discurre por distintos ámbitos territoriales de demarcación hidrológica, que afectan a distintas comunidades autónomas".

Asimismo, alerta del hecho de que el Real Decreto que aprueba esta transferencia no cuente con un informe del Consejo Nacional de Agua, tal y como establece la ley de Aguas, y recuerda que a pesar de que éste no tiene carácter vinculante, garantiza "los distintos y diferentes intereses implicados".

En este sentido, sostiene que "la omisión del informe del Consejo Nacional del Agua" afecta "directamente al derecho de participación de la Comunidad en las cuestiones que inciden en su ámbito competencial".

"El deber de dar participación a las Administraciones Públicas afectadas en aquellas decisiones que vayan a adoptar otro poder público viene exigido por el principio constitucional de lealtad institucional y el de buena fe, en el ejercicio y actuación de los poderes públicos", apunta.

El CJC advierte de que "la vulneración de trámites que se estimen esenciales, como el informe del Consejo Nacional del Agua, constituiría una vulneración del principio de lealtad institucional, viciando la validez de la norma".

Rambla ha destacado ha afirmado que el dictamen del Consell Jurídic Consultiu demuestra que la transferencia de agua del Ebro a Barcelona "es inviable" a no ser que se "enmarque" en el trasvase inicialmente proyectado desde el delta del Ebro hasta Tarragona.

"No se entiende esa transferencia del Consorcio de Aguas de Tarragona al sistema Ter-Llobregat si no se pone en relación del la Confederación Hidrográfica del Ebro, por lo tanto hablamos de un trasvase", ha sostenido el vicepresidente primero y portavoz del Consell.

Rambla también ha apuntado que el hecho de que el Gobierno aluda en el real decreto que regula estas transferencias a su competencia en materia hídrica cuando hay varias autonomías afectadas evidencia que se está hablando de un trasvase, ya que de lo contrario "no tendría sentido la alusión a estas competencias".

"Si estuviéramos hablando de las cuencas internas de Cataluña ni tendríamos que hablar de la Constitución ni tendría que ser el Estado el que pusiera en marcha estas obras ni financiarlas", ha afirmado y ha incidido en que lo que viene a hacer el dictamen del CJC es "ratificar" una posición evidente "a los ojos de todos".

Rambla ha señalado que durante estos días se está viviendo "una imagen que por ridícula no deja de ser impactante, y es ver como unos barcos pasan al lado del Delta del Ebro llenos de agua", cuando este río "está vertiendo agua al mar".

Por otra parte, preguntado sobre la petición del Gobierno aragonés de derogar el decreto que permite la conducción de agua del Ebro a Barcelona después de las últimas lluvias, ha sostenido que el problema de esta región es "estructural" y por lo tanto no se solucionará con las precipitaciones de la pasada semana.