El cambio climático se empieza a percibir en Castilla-La Mancha con el avance de la erosión y la reducción de las lluvias

Toledo.-  El avance de la erosión en algunas zonas de la región, la disminución generalizada de las precipitaciones y los repuntes de mortalidad por olas de calor que se registraron hace unos años son algunos de los efectos que ya está teniendo el cambio climático en Castilla-La Mancha.

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(EFE)

El cambio climático se empieza a percibir en Castilla-La Mancha. En la imagen, el consejero de Medio Ambiente y Desarrollo Rural, José Luis Martínez Guijarro, durante una intervención.

Así lo han indicado hoy el vicepresidente de la Junta, Fernando Lamata, y el consejero de Medio Ambiente, José Luis Martínez Guijarro, que han comparecido ante la prensa tras la constitución de la Comisión Regional de Coordinación de Políticas contra el Cambio Climático, un órgano que coordinará las acciones de los distintos departamentos del Gobierno regional contra el cambio climático.

Martínez Guijarro ha dicho que "el cambio climático es una realidad y está a las puertas de los domicilios de los ciudadanos", y ha añadido que, por eso, es necesario trabajar para retrasar y mitigar sus efectos en la comunidad autónoma.

El consejero ha afirmado que el cambio climático está teniendo efectos de carácter ambiental en Castilla-La Mancha, donde hay una disminución de las precipitaciones, así como de carácter económico, que afectan a sectores tan importantes como la agricultura o el turismo, y en la atención sanitaria.

Martínez Guijarro ha indicado que se están presentando problemas de erosión de suelos en la provincia de Albacete y ha explicado que hay acuerdos específicos con el Ministerio de Medio de Ambiente para llevar a cabo inversiones para la contención de suelos.

Además, ha dicho que se está produciendo una disminución generalizada de las precipitaciones en la comunidad autónoma, con especial incidencia en el sur, y algunos espacios protegidos pueden estar en peligro si no se corrige la situación, como el Hayedo de la Tejera Negra, el exponente de monte siberiano situado más al sur de Europa.

El consejero ha señalado que si se agudiza el cambio climático, las consecuencias pueden ser "nefastas" para este parque natural.

También ha explicado que en Castilla-La Mancha se está llevando a cabo una actuación global contra el cambio climático y está previsto plantar en esta legislatura 20 millones de árboles que sirvan de sumideros de dióxido de carbono (CO2), de los que ya se han plantado 5,2 millones.

El vicepresidente de la Junta ha explicado, por su parte, que en los últimos años se está detectando un aumento de la temperatura, con variaciones extremas en momentos en que no son habituales.

Así, ha recordado que hace cinco años se dio en Europa una sobremortalidad por olas de calor, especialmente en Francia, también en Italia y algo menos en España.

Lamata ha dicho que desde entonces se mantienen medidas en la región para responder a los efectos que estas olas de calor tienen sobre las personas más vulnerables, como los mayores.

En este sentido, ha explicado que desde 2004 hay dispuesta una estrategia de prevención e información a las personas mayores, a través de trabajadores sociales y en los servicios de urgencia de los hospitales y en los centros sanitarios, y se vigilan los aumentos de mortalidad significativos que puedan producirse por olas de calor.

Lamata ha destacado la importancia de la Comisión de Coordinación que hoy se ha constituido, pues garantizará la capacidad de coordinación del Gobierno regional frente a los distintos fenómenos derivados del cambio climático.

Por su parte, Martínez Guijarro ha destacado la voluntad del Ejecutivo autonómico de avanzar en un gran Pacto Regional por el Cambio Climático, del que ya existe un borrador para trabajar con los agentes sociales, al igual que ya hay uno de la futura Estrategia Regional contra el Cambio Climático.

No obstante, ha recordado que el Gobierno regional ya ha iniciado acciones para luchar contra el cambio climático, como la compra pública verde, para "predicar con el ejemplo" y reducir desde la Administración regional las emisiones a la atmósfera y mitigar su efecto en el cambio climático.

También ha subrayado que Castilla-La Mancha es la primera comunidad autónoma en producción de energía eólica y solar, y está promoviendo el uso eficiente de la energía.

La Comisión Regional de Coordinación de Políticas de Cambio Climático está presidida por el vicepresidente de la Junta, mientras que sus vicepresidencias las ocupan el consejero de Medio Ambiente y el director general de Evaluación Ambiental, Miguel Chillarón.