El paro comienza a afectar a la industria vasca

Vitoria.-  La huelga de los transportistas ante el elevado precio de los carburantes ha comenzado a afectar a la industria vasca, obligando a cerrar, entre otras, la fábrica más grande del País Vasco, la de Mercedes-Benz en Vitoria.

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(EFE)

Un camionero ofrece costillas asadas a los efectivos de la Ertzaintza que impedían la salida en manifestación a los transportistas en huelga esta mañana de Aparcavisa en el municipio vizcaíno de Trápaga.

La segunda jornada de paro ha seguido con incidentes aislados, que han llevado a la detención de dos personas en Irún, mientras escasean los productos frescos como la fruta y el pescado y siguen cerrando gasolineras.

Los dos detenidos han sido dos hombres que participaban en un piquete, acusados de amenazar con un destornillador al conductor de una furgoneta.

Han sido arrestados en Irún, la zona que concentra colas de vehículos en el paso fronterizo, que alcanzan los siete kilómetros en sentido a Francia y los tres en dirección a San Sebastián. Ello obliga a que el resto de vehículos circulen por el carril izquierdo, lo que está provocando importantes retenciones.

La situación de los cientos de camioneros allí parados empeora, como ha reconocido el presidente de la Asociación Guipuzcoana de Transporte (Guitrans), Ignacio Cepeda, quien ha pedido hoy a las instituciones que les faciliten comida, bebida y aseo.

"No sé a quién corresponde, pero tener a miles de personas sin poder ducharse, lavarse o comer es triste", ha declarado a EFE Cepeda.

También ha habido movilizaciones en Vizcaya, donde un centenar de camioneros se ha manifestado a pie en los alrededores de Aparcabisa después de que el departamento de Interior prohibiera una marcha de camiones desde Trapagaran a Bilbao.

Según la Ertzaintza, el resto de las carreteras del País Vasco ha presentado un tráfico normal, e incluso más fluido debido a la ausencia de camiones.

La falta de suministros empieza a afectar a la actividad industrial vasca: la fábrica más grande, la de Mercedes en Vitoria, con casi cuatro mil trabajadores, ha parado hoy y también lo hará mañana por la mañana, mientras que Michelin, también con casi cuatro mil empleados, podría suspender alguno de sus turnos a partir de mañana.

Las patronales guipuzcoana y alavesa han advertido de que "la mayoría" de las compañías tendrán dificultades para continuar con su actividad si persiste este paro.

En el puerto de Bilbao las labores de estiba y desestiba se desarrollan con normalidad, aunque no entran ni salen camiones de sus instalaciones.

Las consecuencias para la vida diaria han aumentado, tanto porque no llegan alimentos a las tiendas como por la acaparación de productos por los ciudadanos.

El número de gasolineras cerradas ha aumentado, afectando sobre todo a varias de los hipermercados Eroski y a las más pequeñas. Otro gran distribuidor, como Petronor, mantiene sus gasolineras abiertas.

En las tiendas está casi agotado el pescado y escasea la fruta, salvo la de larga duración (melones, sandías).