Eneko dice que "en algunos sitios nos miraban como si fuéramos ovnis"

Vitoria.-  El alavés Eneko Etxebarrieta y la brasileña de origen japonés Miyuki Okabe, de regreso a Vitoria tras suspender su vuelta al mundo en tándem, han asegurado hoy que el encuentro con otras culturas ha sido "fascinante", aunque en algunos sitios "nos miraban como si fuéramos ovnis".

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(EFE)

Los aventureros Eneko Etxebarrieta (d) y su esposa, la brasileña Miyuki Okabe, que han decidido suspender la vuelta al mundo en tándem comenzada en febrero de 2005 por su embarazo, posan antes de la rueda de prensa en la que han dado detalles de su aventura.

Tras llegar anoche de Caracas, el matrimonio ha comparecido hoy en Vitoria para explicar los detalles de su aventura que, pretenden retomar cuando el bebé que esperan nazca y esté preparado para viajar con ellos.

Según han dicho, durante esta vuelta al mundo que han realizado en pareja se han dado cuenta de que viajar es para ellos "una filosofía de vida" a la que no piensan renunciar, por lo menos, por ahora.

Sin embargo, la noticia del embarazo de Miyuki ha cambiado sus prioridades y ahora su principal reto es el nacimiento de su primer hijo, que será un varón.

Por ello, han decidido hacer un paréntesis en el proyecto "acercandoelmundo.com" pero sus planes son retomar el viaje en un futuro.

Según han contado, concebieron al bebé en el Centro Vasco de Caracas (Venezuela), donde han estado alojados un tiempo, y al segundo mes de embarazo, Miyuki empezó a sentir síntomas de fatiga y no pudo seguir el viaje en bicicleta.

En esta primera etapa, han recorrido en tándem más de 15.000 kilómetros a través de España, Portugal, y América del Sur, desde Ushuaia, en el extremo austral de Argentina, hasta el Caribe.

Sin embargo, el objetivo del viaje no ha sido recorrer kilómetros y quemar etapas, "sino ver lo que nos íbamos encontrando en el camino y comunicarlo a los demás", por eso, ha sido "un viaje muy enriquecedor", ha relatado Eneko.

Las vivencias personales que han experimentado les han cambiado. "Nadie que hace un viaje así vuelve siendo la misma persona", ha contado Eneko.

Ahora, su objetivo es seguir viajando de otra manera, difundiendo el material que han recopilado, más de 50.000 fotos, con las que ilustrar charlas o ampliar los contenidos de la página web.

La experiencia ha sido "fascinante" para ambos, sobre todo cuando llegaban a lugares donde raramente se acercan personas blancas o asiáticas y mucho menos en bicicleta.

"En algunos casos hemos sido vistos como ovnis, de repente en un sitio donde nadie anda en bicicleta en la Patagonia y cuando una persona hace semanas que no ve a nadie, mal se puede imaginar que llega alguien en todoterreno pero en bicicleta tándem, de cuatro metros y medio? pues es surrealista¡", ha explicado el alavés.

En la Amazonía, también vivieron una experiencia única cuando, a través de Unicef, tuvieron un encuentro con una tribu indígena. "Llegamos con el tándem a un lugar donde prácticamente no habían visto nunca a personas de otra raza, entonces, al llegar con la bicicleta nos miraban con temor porque para ellos la bici es una cosa extrañísima, pero la sorpresa fue mutua", ha asegurado.

El encuentro con la realidad de la pobreza y de la marginación ha sido otro de los ingredientes de este viaje, en el que han colaborado con la ONU y con Unicef visitando proyectos solidarios.

En su recorrido por Brasil, Miyuki se ha sorprendido de lo poco que conocía su país. "Parecía que antes vivía en una burbuja", ha afirmado.

La joven ha dicho que una de las cosas que más le ha sorprendido es la capacidad que tiene mucha gente de vivir en situaciones muy difíciles, adaptándose a la naturaleza en condiciones adversas, como una familia que vivía en la orilla del río Amazonas o los Movimientos Sin Tierra "que pasan años aguardando conseguir un trozo de tejado para vivir".