La Expo no gusta a todos

Cuando los fuegos artificiales comiencen a colorear el cielo de Zaragoza durante la Expo Internacional que abre ya sus puertas, no todo el mundo quedará deslumbrado por este bello espectáculo. El mismo día que los primeros visitantes empiecen a disfrutar de la original arquitectura de los 140 pabellones construidos, diversas organizaciones ecologistas y sociales saldrán a la calle para pedir el boicot de tan esperado evento.

Cartel de convocatoria a la manifestación contra la Expo

"El lema de la Expo 'Agua y desarrollo sostenible' se sostiene muy poco", nos comenta Teresa Duple, portavoz de Ecologistas en Acción de Zaragoza, uno de los grupos 'disidentes' junto a Espazio Alternatibo, la Asociación 'El Cantero' de Torrero y el Colectivo de Objeción y Antimilitarismo-Alternativa Antimilitarista MOC.

A pesar de los muchos compromisos ambientales y medidas correctores incluidas en el proyecto de esta Exposición Internacional, que estará abierta desde el 14 de junio al 14 de septiembre, estos colectivos no acaban de creerse los beneficios de lo que todo el mundo a su alrededor considera una gran oportunidad para la ciudad y el río Ebro.

"La Expo nos deja en el camino de un modelo de desarrollo devorador de recursos naturales y de personas, con esa lógica política que prima el beneficio privado por encima del bien social necesaria para 'poner la ciudad en el mapa' y traer inversiones y turistas. Donde la ciudadanía no somos más que mendigantes de trabajo, consumidoras/es y público dispuesto para el aplauso. Y todo ello con la hipocresía de la etiqueta verde como generador de legitimidad". Esto es lo que expresa el manifiesto de rechazo a la fiesta del agua. "Hacemos un llamamiento, no sólo a no colaborar con la Expo, si no a luchar contra este macroevento y lo que representa, en la forma que cada cual encuentre más oportuna; a resistirse contra este modelo de desarrollo; a rebelarse contra la ciudad-empresa; a romper consensos legitimadores; a crear resistencias".

Para Duple, "el gran perjudicado de la Expo es el río Ebro y sus alrededores: los bosques de la ribera, las huertas y en concreto, el meandro de Ranillas". "El proyecto sobre este espacio de gran valor natural sólo responde a la intención de sacar partido urbanístico a unos terrenos que en los últimos años se han visto revalorizados con la construcción de la estación del AVE y del futuro puente del Tercer Milenio", explica la ecologista. "Las cosas se han hecho muy deprisa y algunos proyectos incluso no han valorado el impacto ambiental, además, el evento conlleva un excesivo gasto de energía y un derroche de dinero que podría utilizar la ciudad para otras cosas", concluye Duple.

Estos disidentes también se hacen escuchar por la música: algunas bandas zaragozanas como Violadores del Verso, Chicharrica, Mallacán, Criatura, Jahsta o Manolo Kabezabolo expresan su desacuerdo en el CD "Cuando el Ebro suena... Disidencia lleva".