Si no quieres pagar canon también por la TDT ¡corre!

MADRID.-  A correr por la TDT. El Gobierno está empeñado en el éxito de la implantación de la televisión digital terrestre antes del apagón analógico de abril de 2010. Y ha encontrado otra forma de impulsarlo y de hacer feliz a los recaudadores de derechos de autor: el canon digital cobrará 12 euros por los descodificadores de TDT con disco duro dentro de un año y meses antes del apagón. Un nuevo impuesto de los autores para los equipos que permiten grabar los programas para verlos cuando quieras, una de las grandes ventajas interactivas y de uso de la nueva televisión.

Esquela de la sociedad de la información por el canon (Asociación de Internautas).

El 1 de julio de 2009 los descodificadores y receptores de TDT con disco duro serán 12 euros más caros por el canon digital. Nueve meses antes del apagón analógico de abril de 2010. Menos mal que la orden ministerial que impone el canon dice que "se han tenido en cuenta (…) el desarrollo de la implantación de la televisión digital para que determinados equipos descodificadores de señales de televisión digital con disco duro integrado, queden sujetos automáticamente al pago en concepto de compensación equitativa por copia privada una vez transcurrido el primer año de vigencia de esta Orden".

Así que los consumidores que quieran disfrutar de todas las ventajas de la televisión digital tendrán que darse prisa. Si no compran sus equipos rápidamente pagarán más por las ventajas de la nueva televisión, como la grabación de programas para verlos a la hora que más les convenga.

El canon es implacable. Ni el servicio público lo detiene. Mientras el Gobierno y las administraciones gastan dinero público para la transición a la TDT y las televisiones se quejan y piden más ayudas, más oportunidades de negocio y menos publicidad en las televisiones públicas, el canon vuelve a castigar a los servicios más avanzados de la televisión digital.

Interactividad y ventajas para el usuario son las bondades de la TDT aireadas para que los ciudadanos la apoyen lo antes posible pese a los pocos servicios que ofrece todavía. Pero la interactividad no existe si los televidentes no cuentan con sintonizadores interactivos capaces de procesar la señal. Y en la mayoría de los casos esos sintonizadores tienen discos duros para que los usuarios puedan programar cuándo quieren ver sus programas favoritos.

Libertad para los telespectadores, más programas, más posibilidades de elección, más interactividad, dice la Comisión Europea, pero también señala que es necesaria "una reducción del precio de venta de los descodificadores digitales y televisores con descodificador integrado". El canon sobre los descodificadores con disco duro perjudica a los usuarios más intensivos, a quienes quieren aprovechar todas las ventajas de los datos de programación que ofrece la TDT para ver sus programas cómo y cuando quieran. Programas pagados por la publicidad o el pago por visión (si al final se aprueba el año que viene, como anuncian algunas fuentes) gracias a la concesión de un "servicio público esencial, cuya titularidad corresponde al Estado", dice la ley de televisiones privadas.

Pagar de nuevo por lo que ya se ha pagado y sólo existe como negocio por la concesión de un servicio público. Es la segunda revolución audiovisual del Ejecutivo de Zapatero. Eso sí, algunos no están contentos, algunas sociedades de gestión de derechos de autor se quejan por perder un año de ingresos en un mercado en crecimiento por el dinero público que se gasta en promoverlo y porque el apagón acecha. Mercado cautivo, negocio seguro.