Más ‘nidos’ y menos ‘maos’ en la cartera

Los Juegos lo copan estos días todo en China. Hasta el punto de que han desplazado al mismísimo Mao Zedong… incluso de los billetes. El Banco Central del país ha comenzado a emitir una serie con el valor de diez yuanes (0,93 euros) para conmemorar la celebración de los Juegos Olímpicos, y en ellos, el busto del fundador de la República Popular queda sustituido por la ilustración de la imponente estructura de ‘el nido de pájaro’, el ecléctico Estadio Nacional que acogerá entre otras las pruebas de atletismo.

Quitan a Mao...

El busto de Mao saluda desde el anverso de todos los billetes con valor superior a un yuan (apenas 10 céntimos de euro) que a día de hoy circulan por China. Sólo en los de cinco maos (medio yuan) se conservan todavía las imágenes de minorías étnicas en vez de la imagen del Gran Timonel y, aunque son los de menor valor, pues apenas sirven para pagar al cuidador de bicicletas que aparece en cada esquina, son los más bellos en opinión de quien escribe estas líneas.

Observar los cambios de la Historia a través de los billetes y sus imágenes resulta particularmente curioso en China, pues fue aquí donde se imprimió el primer papel moneda del mundo, en tiempos de la dinastía Song (siglos X al XIII). Fue cuando los comerciantes se cansaron de cargar con las pesadas monedas agujereadas que transportaban como ristras de ajos, hilvanadas con un cordel.

El primer billete pasó a ser conocido como 'jiaozi' y nació en la provincia de Sichuán. Desde entonces, han sido muchos los rostros, personalidades y lugares que han quedado inmortalizados en los yuanes chinos.

Sun Yatsen, el fundador de la República, lo hizo a principios de siglo. Vladimir Ilyich Ulyanov Lenin durante un breve periodo alrededor de los primeros años 50, cuando nació la República Popular. Y el fundador de ésta, Mao, pasó a presidirlos a finales de los 90 como medida contra las falsificaciones.

...y ponen ¡el estadio!

En la actualidad, un grupo de 12 intelectuales lucha para que el dinero chino tenga rostros nuevos, además del de Mao (y no 'en vez de', convendría subrayar, ya que esa sí que sería una propuesta revolucionaria). Entre las grandes figuras que se barajan están los poetas Li Bai y Qu Yuan (cuyo aniversario de muerte se recuerda en China con un festival), así como Yue Fei y Wen Tianxiang, sendos nacionalistas que defendieron a ultranza la soberanía china frente a los ataques de potencias extranjeras.

Los nuevos billetes anunciados ayer por el Comité Organizador de Pekín 2008 serán seis millones en total y entrarán en circulación mañana. Se trata de una edición limitada de color verde claro, con la que el Estadio Nacional, proyectado por los arquitectos suizos de Herzog y de Meuron e inspirado por el irreverente artista chino Ai Weiwei, afianza su estatus de icono de la nueva China.

El ‘nido’ ilustra el anverso, bajo el logotipo de las Olimpiadas pekinesas y sobre la silueta del Templo del Cielo, el oratorio donde los emperadores de las dinastías Qing y Ming pedían al firmamento buenas cosechas para el país.

En el reverso, la planta del estadio (una vez más) sirve de fondo para el dibujo de un discóbolo griego y otras escenas deportivas. En los billetes normales de 10 yuanes, este espacio lo ocupa un dibujo de las Tres Gargantas, en el río Yangtzé, antes de quedar inundadas por la colosal presa del mismo nombre.

Los billetes mantienen el escudo nacional y el nombre del Banco Central, en caracteres de chino simplificado (anverso) y, en el reverso, en pinyin, mongol, tibetano, uighur y zhang. Además, según el portal de noticias Sohu.com, incluyen hasta seis medidas de seguridad, incluidas varias marcas de agua, para poder identificarlos y evitar que sean falsificados.