Los príncipes de la Expo

Zaragoza.-  Con la cuarta visita de los Príncipes de Asturias a la Expo esta semana se ha cerrado la lista de más de una decena de miembros de la realeza mundial que se han dejado ver en el recinto de Ranillas, que posiblemente ha tenido en el heredero al trono de Japón, Naruhito, su visitante más mediático.

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(EFE)

Con la cuarta visita de los Príncipes de Asturias a la Expo esta semana se ha cerrado la lista de más de una decena de miembros de la realeza mundial que se han dejado ver en el recinto de Ranillas, que posiblemente ha tenido en el heredero al trono de Japón, Naruhito, su visitante más mediático.

No obstante, todos ellos, desde el heredero holandés, Guillermo Alejandro, y su esposa, Máxima Zorreguieta, a los príncipes Felipe de Bélgica, Alberto de Mónaco, Moulay Rachid de Marruecos, Saud Bin Naif Bin Abdulaziz de Arabia Saudí y la princesa Ubolrutana Mahidol de Tailandia centraron la atención de la prensa y provocaron el murmullo, los flashes y los vítores de miles de curiosos.

Felipe y Doña Letizia visitaron la Expo por primera vez el 13 de junio, día en el que junto a los Reyes, los Duques de Palma y la Infanta Elena, presidieron los actos institucionales de la ceremonia inaugural de la muestra.

La Familia Real en pleno regresó a la Expo tan sólo once días más tarde, en el Día Nacional de España, para darse un baño de masas entre los miles de visitantes que se agruparon en su recorrido por el recinto de la muestra, cuyos voluntarios obsequiaron además a los príncipes con dos pequeños uniformes para las infantas Leonor y Sofía.

El 9 de julio fue la tercera ocasión en la que ambos visitaron la Expo, una jornada que dedicaron a recorrer los pabellones de las comunidades y ciudades autónomas.

Entretanto, pasaron por la muestra en sus respectivos días nacionales Guillermo Alejandro de Holanda, y su esposa, Máxima Zorreguieta, Felipe de Bélgica y Alberto de Mónaco, quienes se sumaron a los objetivos de la Expo en favor del agua y el desarrollo sostenible, y despertaron el entusiasmo entre gran parte del público habituado a seguir sus vidas en las páginas de la prensa rosa.

Pero la visita más esperada fue la del heredero al trono japonés, el príncipe Naruhito, quien durante los tres días que permaneció en Zaragoza acaparó todo el protagonismo dentro y fuera de la Expo.

Naruhito llegó procedente de Madrid, Toledo y Ciudad Real dispuesto a conocer algunos de los rincones más emblemáticos de la ciudad, como la basílica de El Pilar y el palacio de la Aljafería, y se fue de ella después de recoger su Llave de Oro de manos del alcalde, Juan Alberto Belloch.

Dentro de la Expo, el heredero japonés -que viajó a España sin su esposa Masako- disfrutó del éxito del pabellón de su país, uno de los más populares, y asistió como espectador a varios espectáculos, como el musical "Mañana", protagonizado las mascotas de la Expo de Aichi, Morizo y Kiccoro, junto a la de Zaragoza, Fluvi.

Naruhito coincidió el 20 de julio en el recinto con el príncipe Moulay Rachid de Marruecos, quien participó en los actos del Día Nacional de su país y generó gran expectación, particularmente entre muchos de sus compatriotas que se congregaron a las puertas del pabellón del país magrebí.

Tras ellos, llegó el 30 de julio el príncipe y embajador en España de Arabia Saudí, Saud Bin Naif Bin Abdulaziz, y veinte días después la princesa Ubolrutana Mahidol de Tailandia, cuyo paso por la Expo se recordará por las largas esperas que, ajena al protocolo y a su agenda, hizo aguardar a las autoridades y los medios de comunicación que se proponían recibirla.

La visita de los Príncipes de Asturias del pasado jueves, a diez días de la conclusión de la Expo, ha sido quizás la penúltima ocasión en la que los visitantes podrán ver a algún miembro de realeza en el recinto de la muestra.