Regalos a 0 euros

O casi. No te vamos a pedir que uses la imaginación porque alegarás que careces de chispa y de tiempo para pensar. Hacemos el trabajo sucio por ti. Sólo tienes que copiar y pegar. Eso sí, con un mínimo de arte, aunque sea de andar por casa.

Manda este artículo a quien quieras que te obsequie con algo de esta lista.

stallio (Flickr)

Graba un CD

jaqian (Flickr)

O un pendrive, que es más actual. O un casette si te va lo retro y quieres ser ultramoderno. De hecho en internet venden pendrives con apariencia de cinta de las de antes. El extra del CD es que además puedes currarte la portada. Y si eres de los que ya no salen de internet ni para ir al cuarto de baño, usa la tecnología para fabricar y enviar desde tu ordenador. Eso sí, reza por que no se entere la SGAE si no quieres que se persone en tu hogar a exigirte los originales y las facturas que demuestran que los has comprado.

Álbum de fotos

orgazmika (Flickr)

Recupera las fotos de papel o tira los últimos ejemplares de Polaroid que tenías reservados para una ocasión especial como quien guarda un Pingus de 2005. Se te saltarán las lágrimas cuando veas y toques esas imágenes positivadas, rescatadas del baúl de los recuerdos o todavía calentitas, de anteayer. Piensa que alguien lo heredará algún día. No corres el riesgo de que fenezca el disco duro y te quedes sin un solo instante de tu vida.

Soy tu esclavo

(EFE)

No es preciso que te conviertas en el Kunta Kinte del siglo XXI. Pero tener a alguien disponible para lo que desees no tiene precio, al menos uno que se pueda pagar alegremente. Fabrica con esas manitas y unos lapiceros, o a golpe de photoshop, un bono con los días o las horas que regalas. Te lo agradecerán por los siglos de los siglos. Y sirve lo mismo para las labores del hogar que para uso íntimo y personal. Una idea: llevar a la suegra de compras. Qué bien sienta tener poder por muy efímero que sea. Regala carta blanca.

Escribe una frase lapidaria

Sólo una expresión en una enorme cartulina también impresiona lo suyo. Resulta contundente y la brevedad del mensaje aporta profundidad a la oración. El artista Juan Galdeano regalaba en su última exposición un cartel con la frase 'iros todos a la mierda'. Y hay que reconocer que queda superresultón colgado en la entrada de casa para que cualquiera que pise el umbral se quede congelado por la invitación.

Receta personalizada

Crea una receta y bautízala con su/tu nombre. Apúntala en un cuaderno vacío que irás rellenando con el resto de ideas que surjan a partir de ahora. Está permitido buscar inspiración en los libros de cocina, pero no vale la copia burda. Siempre puedes consultar a un familiar con merecida fama en los fogones y seguir los ideas de los glotonios. También vale idear un cóctel.

Pintamonas

Sobre una camiseta vieja, encima de papel de periódico, en una caja de cartón... existen infinitos soportes que convierten en exclusivo el más pueril de los dibujos. Existe pegamento apto para telas con el que puedes formar un collage textil sobre el pecho de la t-shirt, o a base de hilo y aguja coser pedacitos de otras telas. Si luego enrollas la camiseta resultante y la atas con una cuerda, logras un efecto vintage que algunas marcas cobran a precio de oro.

Inscripción en una carrera popular

¿No quieres siempre hacer deporte pero nunca te acabas de lanzar? Pide que te inscriban en una carrera popular y prepárate como si fuera la meta más importante de tu vida. El maratón en parejas de Valtiendas, en el que es obligatorio mantenerse unidos durante todo el recorrido, es un buen comienzo. El maratón del Sahara, el próximo 9 de febrero, conjuga deporte y movilización. Es un tema de justicia social y, por supuesto, tiene un precio. Pero merece la pena el esfuerzo económico.