Embajador peruano ve la "intervención" en asuntos internos críticas de Bolivia

La Paz.-  El embajador de Perú en Bolivia, Fernando Rojas, calificó hoy de "intervención" en asuntos de su país las críticas de autoridades bolivianas que responsabilizan al Gobierno de Lima de la violencia que ha causado al menos 33 muertes en ese país.

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(EFE)

Según el embajador, "lo fundamental es que si el Gobierno de Bolivia encuentra necesario hacer este pedido use las vías del derecho internacional que regulan la relación entre países. EFE/Archivo

"Hubo declaraciones oficiales, incluso de ministros, que se refirieron con bastantes calificativos y mucha dureza sobre estos hechos con informaciones que no son las correctas y no fueron contrastadas", afirmó Rojas en declaraciones a medios locales.

La ministra de Justicia de Bolivia, la indígena quechua Celima Torrico, mostró el sábado su preocupación por los violentos enfrentamientos del viernes en la Amazonía peruana que se saldaron con al menos 33 muertos, entre policías e indígenas, según las cifras oficiales.

La ministra boliviana acusó al Gobierno de Alan García como "único responsable" y al mandatario peruano de no atender las demandas y los derechos de los indígenas peruanos.

Además de Torrico, organizaciones campesinas y una legisladora oficialista boliviana criticaron y responsabilizaron al Gobierno peruano de las muertes de, según las cifras oficiales, 24 policías y nueve indígenas.

El embajador dijo no tener información sobre la posibilidad de que el líder indígena Alberto Pizango se encuentre en Bolivia, como apuntó la ministra de Interior de Perú, Mercedes Cabanillas.

Además, negó que su gobierno haya manifestado que autoridades bolivianas puedan estar de algún modo involucradas en los sucesos violentos ocurridos en su país, al ser preguntado por las declaraciones del presidente Alan García sobre una supuesta participación externa en este episodio.

El diplomático precisó que "lo que se ha mencionado es que probablemente habría habido participación internacional, pero de ninguna manera se ha puntualizado en ninguna persona y menos en ningún país"

Rojas lamentó los enfrentamientos que han generado que su país "esté en duelo nacional" y explicó que no se trata de un "acontecimiento que se ha precipitado de un día para otro".

Para el embajador, Lima ha conducido durante 55 días "un permanente esfuerzo" de diálogo con los dirigentes indígenas conducido por el presidente y el consejo de ministros "en los que se ha tratado de buscar una situación", pero que no tuvo resultados.

"Durante todo ese tiempo los nativos han adoptado una serie de medidas de fuerza como bloqueos de carreteras y cortes de abastecimiento de gas que han perjudicado al conjunto de la sociedad", dijo Rojas al señalar que, tras esos 55 días, la policía peruana tomó acciones para restablecer la tranquilidad.

Para Rojas, el solo hecho de que hayan muerto 24 policías, algunos de ellos degollados en un "acto barbárico" y 9 indígenas en las ciudades amazónicas peruanas de Bagua Chica y Bagua Grande "demuestra que no hubo ninguna matanza ni premeditación" por parte de las fuerzas de seguridad.

El representante diplomático advirtió de que las relaciones entre Bolivia y Perú están "en un momento preocupante" pero abogó por la solución de las divergencias mediante el diálogo y por una "visión constructiva" en las relaciones bilaterales.

Por otra parte, Rojas consideró legítimo que Bolivia presente una demanda contra Perú ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya (CIJ) para cancelar el asilo que ese país otorgó a tres ex ministros del Gobierno del ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada acusados de "genocidio" por la muerte de más de 60 personas en 2003.

Según el embajador, "lo fundamental es que si el Gobierno de Bolivia encuentra necesario hacer este pedido use las vías del derecho internacional que regulan la relación entre países. Nos parece bien y ésa es la vía recurrir a solicitar la extradición", concluyó.