Caetano filma "Francia" a través de los ojos de su hija

Venecia (Italia).-  El cineasta uruguayo Israel Adrián Caetano ha rodado "Francia" a través de los ojos de su hija Milagros, quien protagoniza junto a Natalia Oreiro esta cinta que fue presentada hoy en la 66 edición del Festival Internacional de Cine de Venecia.

Así lo explica el propio cineasta en una entrevista con Efe en la ciudad de los canales, donde "Francia" se presenta dentro de la sección paralela "Jornadas de Autor".

"'Francia' ha sido una película muy personal. El origen de la película es que hace unos años le regalé una cámara de vídeo a mi hija. Y con ella filmó unas mil horas. Un día empecé a bajarlo todo a la computadora y vi cómo rodaba un niño. Más o menos le robé la estética de la película a ella", comenta este uruguayo afincado en Argentina.

"De ahí viene toda esa estética de desorden, diferente, es como un collage, es como un puzzle. Y está basado más en cómo filma un niño, en la mirada de un niño", añade.

"Francia" es la historia de Mariana, una niña de padres separados que no termina de integrarse en el colegio y que sufre las consecuencias emocionales de la ruptura de sus progenitores y del hecho de que éstos tengan que vivir juntos por motivos económicos.

El director uruguayo (Montevideo, 1969) se inspiró para ello en la historia de unos vecinos suyos y decidió poner como protagonista de la cinta, además de a Oreiro -conocida también por su faceta de cantante-, a su hija Milagros.

"Trabajar con mi hija fue una experiencia extraña porque en realidad fue la última actriz que fue elegida. Tuve en un principio el temor de ver cómo resulta trabajar con la hija de uno, porque tiene un carácter muy parecido al de uno y los iguales suelen chocar", comenta Caetano.

El director, que cuenta entre sus películas con "Bolivia" (2001) o "Pizza, birra, faso" (1997), afirma que "es una película hecha por niños y para niños".

"Creo que es la primera vez que he hecho una película que pueden ver mis hijos. Mis hijos siempre quieren ver las películas que yo he hecho pero tienen siete u ocho años y normalmente por la temática no pueden", apunta.

Según Caetano, los niños de hoy en día ya no se traumatizan por el hecho de que sus padres se divorcien, sino porque continúen discutiendo, y eso es lo que refleja la película, cuyo final feliz supone la total separación de los progenitores de Mariana.

En un momento de la entrevista irrumpe Milagros, quien acompaña estos días a su padre en Venecia, y confiesa que ha sido "divertido" trabajar con Caetano y que Italia es el país "más lindo" de los que hasta ahora ha visto.

El padre no quiere que se dedique a la interpretación, prefiere que sea directora de cine, porque, según él, tiene aptitudes para ello. Pero ella no duda y afirma con un "sí" rotundo que le gustaría seguir actuando.

"Francia" se presenta en Venecia como fruto de un proyecto "muy personal" y de bajo presupuesto. "Va a contracorriente de todo lo que he venido haciendo. Estoy en un momento personal en el que no sé si tengo ganas de indagar en las tendencias actuales. Hay una corriente ahora que va en pro de la violencia y no sé si tengo ganas de ese cine", incide Caetano.

"Yo lo he consumido y me gusta y soy un fanático del cine de terror. Pero esta película va a contracorriente y me parecía precisamente que el riesgo radicaba ahí", añade.

El filme habla de esa gente a la que se les ha negado sus sueños, como el de viajar a ese país del que habla el título, pero que tienen una dignidad muy fuerte y que no ceden ni piden perdón por más que tengan el mundo en contra.

Tras esta experiencia, Caetano ya trabaja en su próximo proyecto, en el que también participará Oreiro y en el que, paradójicamente, sí que seguirá la corriente actual: habrá sangre y algo de terror.

Miguel Cabanillas