Un ciclista español prepara en Egipto una expedición entre El Cairo y Dakar

El Cairo.-  El ciclista español Juan Menéndez ha realizado "un viaje de prospección" en Egipto para preparar una expedición que le llevará desde El Cairo hasta Dakar (Senegal) a través del desierto del Sáhara.

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(EFE)

El ciclista español Juan Menéndez frente a las pirámides de Giza de El Cairo, durante sus dos semanas de estancia en Egipto donde prepara la travesía que a principios de diciembre le llevará a cabo desde la capital egipcia hasta Dakar.

Este desafío deportivo comenzará a principios de diciembre, pero Menéndez, de 26 años, ha venido al país árabe dos semanas para efectuar una travesía preparatoria de 400 kilómetros desde la ciudad costera norteña de Marsa Matruh al oasis de Siwa, cerca de la frontera con Libia.

"Ha sido un entrenamiento sencillo", comentó hoy a Efe Menéndez, que confiesa que su objetivo ahora es el de aclimatarse y "ver las dificultades sobre el terreno".

Además, también ha aprovechado su estancia en El Cairo para solucionar "el tema de los permisos", necesarios para poder transitar por algunas zonas del desierto y cruzar las fronteras entre los distintos países.

Un día antes de volver a Madrid y dar por terminado este primer contacto con el continente africano, el ciclista explicó que en su expedición será autosuficiente y llevará en las alforjas y el remolque una tienda para dormir en el desierto y el agua y la comida necesarias para subsistir.

Durante este gran reto que durará unos cinco meses, el asturiano recorrerá entre 6.000 y 7.000 kilómetros y atravesará el Sahara en diagonal, pasando por Egipto, Libia, Argelia, Mali y Senegal, y posiblemente también por Níger y Chad.

"Mi filosofía es hacer expediciones en bicicleta, en solitario y sin coche de apoyo por los lugares más inhóspitos del planeta", subrayó.

Este proyecto por el Sahara tendrá además una vertiente solidaria, ya que Menéndez hará en determinados puntos de su recorrido de embajador de la ONG Mensajeros de la Paz.

No es la primera vez que el deportista se monta en una bicicleta para enfrentarse a un desafío de este calibre. Desde que hiciera el Camino de Santiago con dieciséis años no ha cesado en su objetivo de rodar por parajes de extrema dificultad y muy distintos entre sí, desde los Urales hasta la Amazonía.

"Después de recorrer las carreteras de hielo del Ártico canadiense a 25 y 30 grados bajo cero, quería buscar el contraste", dijo Menéndez, para quien "el Sahara es un entorno durísimo".

Para el ciclista asturiano, estas expediciones son "una forma de vida, tanto en lo deportivo como en el aprendizaje de lo étnico y cultural" de cada país que conoce.

"Lo enfoco en un plan serio, buscando la dificultad del reto y de la hazaña deportiva. Igual que un alpinista hace ocho miles yo hago este tipo de expediciones", concluyó.