España quiere que la UE tenga en cuenta los incendios en el cómputo de emisiones

Bruselas.-  España ha propuesto a la Unión Europea que tenga en cuenta el impacto de los incendios y otros desastres naturales para calcular las emisiones nacionales de dióxido de carbono (CO2), ya que cuando se producen estas catástrofes resulta difícil cumplir con los objetivos de reducción.

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(EFE)

Un miembro del cuerpo de bomberos trabaja en las labores de extinción de un incendio originado el pasado mes de septiembre en Portugal y que se trasladó a la parte salmantina de La Bouza, localidad del Parque Natural de Las Arribes del Duero. EFE/Archivo

La propuesta española figura en un documento, al que ha tenido acceso Efe, que analizarán los ministros europeos de Medio Ambiente la próxima semana en Luxemburgo.

Los Veintisiete negocian la manera de reflejar en el cómputo de emisiones contaminantes la acción de los bosques, que actúan como sumideros de CO2 -asimilan CO2 atmosférico en el proceso de fotosíntesis, con lo que ayudan a reducir las emisiones-.

El objetivo es definir una posición comunitaria clara antes de la cumbre de la ONU sobre cambio climático, que se celebrará del 7 al 18 de diciembre en Copenhague.

Los países que como Suecia cuentan con grandes superficies arbóreas tienen un gran interés en contabilizar este servicio que de forma natural prestan los árboles a la purificación de la atmósfera, ya que les deja más margen de maniobra para cumplir con sus objetivos nacionales de reducción de emisiones.

España apoya introducir esta "flexibilidad" y vas más allá, al sugerir que se tenga en cuenta que en casos de "fuerza mayor" -limitados a incidencias naturales sin influencia de la acción humana- los países podrían tener dificultades para cumplir sus objetivos de reducción.

Cuando se produce un incendio, por ejemplo, no sólo se emiten gases contaminantes a la atmósfera sino que al quedar el bosque destruido se pierde toda su función de absorción de CO2.

Grecia y Portugal, países expuestos a incendios forestales cada verano, han apoyado la propuesta española en las negociaciones a escala diplomática mantenidas hasta ahora, señaló hoy a Efe una fuente cercana a las negociaciones.

Sin embargo, la Comisión Europea ya ha alertado de que introducir esta excepción -que luego se exportaría al contexto internacional- podría servir de excusa a países como Canadá y Australia para no ceñirse a sus objetivos de reducción, una vez queden fijados en la cumbre de Copenhague.

Las organizaciones ecologistas consideran que si se tienen en cuenta los desastres naturales, como propone España, el compromiso global de reducción de emisiones quedaría muy debilitado, ya que habría numerosas excepciones a los objetivos medioambientales.