El aumento de 100 dólares en los sueldos de los maestros no evitará la huelga en P.Rico

San Juan.-  La subida de 100 dólares en el sueldo de los maestros que anunció esta semana el Gobierno puertorriqueño no ha contentado a todos los docentes, que amenazan con empezar el año próximo con una huelga en las escuelas públicas del país.

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(EFE)

La subida de 100 dólares en el sueldo de los maestros que anunció esta semana el Gobierno puertorriqueño no ha contentado a todos los docentes, que amenazan con empezar el año próximo con una huelga en las escuelas públicas del país.

El presidente de la Federación de Maestros, Rafael Feliciano, aconsejó hoy a sus afiliados que limiten sus gastos durante la Navidad para que puedan hacer frente a una huelga que convocará "en cualquier momento" una vez comience el próximo semestre en enero.

Feliciano dijo en conferencia de prensa que el "raquítico" aumento de 100 dólares es "una miseria, una burla, una bofetada" y de "un cinismo sin precedentes" que, teniendo en cuenta las deducciones y la inflación, tendrá un efecto real equivalente a 40 dólares.

Indicó que después de 25 meses negociando el nuevo convenio colectivo para los 45.000 empleados de la educación pública, "el patrono mantiene su actitud intransigente y no da paso a culminar la negociación".

"La paciencia se acabó, la huelga está en marcha" y es "inminente", reiteró Feliciano, máximo responsable de la que será, de celebrarse finalmente, la tercera huelga convocada en la historia del sindicato, después de las de 1974 y 1991.

La Federación de Maestros, que ha firmado con el patrón hasta ahora 28 cláusulas de las 62 recogidas en su propuesta de convenio, reivindica un aumento del 18 por ciento del sueldo medio, actualmente de unos 19.200 dólares anuales y muy por debajo de los de EE.UU., que oscilan entre los 58.000 y los 35.000 dólares.

El sindicato reclama también establecer un máximo de 15 estudiantes por grupo y mejorar las condiciones de salubridad de las escuelas expuestas a asbesto y cercanas a aguas residuales y gases tóxicos, como periódicamente se confirma que existen con reportes de niños intoxicados.

También exigen que se garanticen derechos adquiridos, que se reconozca la antigüedad por años de servicios prestados, que se contraten más psicólogos, que se cree la figura del maestro itinerante y que se especifique el compromiso del Estado a no privatizar las escuelas públicas.

Feliciano sostuvo que el gobernador, Aníbal Acevedo Vilá, por su actitud "arrogante" en la negociación "está cavando su propia tumba".

Por su parte, Aida Díaz, presidenta del otro sindicato de docentes en Puerto Rico, la Asociación de Maestros, expresó en un anuncio de periódico publicado hoy a página completa su agradecimiento por el aumento de 100 dólares.

"Sin embargo, le hemos dejado saber (al Gobernador) que esto no es suficiente y que quedamos en la expectativa del cumplimiento de mejores condiciones salariales y laborales", dijo Díaz, quien ha reiterado que la amenaza de huelga no es la estrategia oportuna para conseguir estas mejoras.

Por eso, Feliciano asegura que Díaz es "un instrumento del patrono".

El secretario del Departamento de Educación, Rafael Aragunde, ha reconocido el derecho al aumento que reclaman los maestros, aunque insiste en que no será posible honrarlo hasta dentro de unos años.

Sin embargo, defiende que no es justo que los policías ganen más que los responsables de la educación de los niños.

Cuando Acevedo Vilá anunció el aumento ayer, miércoles, Arangunde defendió "el rigor" con el que se han dedicado más recursos a las escuelas públicas del país y sostuvo que "mejorar las condiciones de trabajo de los maestros y aumentar su salario han sido dos prioridades para nosotros".

"Nuestra posición es mantener abiertas las líneas de comunicaciones, a pesar de que diferimos de las estrategias de la Federación de Maestros", aseguró Aragunde.