Comienza la vista oral por la demanda que presentó un conductor que atropelló y mató a un joven ciclista

LOGROÑO.-  El Juzgado número 1 de Haro (La Rioja) acoge la vista oral por la demanda presentada por un conductor que atropelló y mató a un ciclista de 17 años en Castañares de Rioja en 2004, en la que pide 20.000 euros a los padres del fallecido por los daños que sufrió su vehículo.

EP (EUROPA PRESS)

El Juzgado número 1 de Haro (La Rioja) acoge la vista oral por la demanda presentada por un conductor que atropelló y mató a un ciclista de 17 años en Castañares de Rioja en 2004, en la que pide 20.000 euros a los padres del fallecido por los daños que sufrió su vehículo.

El 26 de agosto de 2004, Enaitz Iriondo regresaba al camping en bicicleta después de haber estado en el pueblo, situado a dos kilómetros cenando con los amigos. "Fue tan cauto", explica la madre del fallecido, Rosa María Trinidad, en la página web de Stop Accidentes, que volvía al camping utilizando un camino vecinal que discurre paralelo a la carretera secundaria LR-111. "Sin embargo, al salir a la carretera LR-111, el conductor de un Audi A8 que circulaba a gran velocidad lo arrolló y lo mató".

Un 'Informe Técnico' elaborado por un perito estableció el conductor circulaba, intantes antes del accidente, a 173,9 kilómetros por hora, cuando el límite de velocidad máximo permitido en esa carretera es de 90. "La frenada fue tan fuerte que las huellas de las ruedas del coche estuvieron allí durante casi un año", agrega la madre.

Del mismo informe se puede concluir que el impacto no se produjo en el momento en el que el joven se incorporó desde el camino a la calzada, sino después que hubiera avanzado varios metros. La madre destaca que a una velocidad de 173,9 kilómetros por hora se recorre 44,4 metros en un segundo, "y, desgraciadamente, esto está en contraposición con lo que señala el atestado".

"El impacto fue tan brutal dada la velocidad del coche que mi hijo voló por los aires a mas de 18 metros de altura, sobrepasando la luz de las farolas que estaban ubicadas en dicha carretera", explica.

No obstante, señala, "tal como se realizó y redactó el atestado del accidente, no se dio ninguna importancia a la velocidad que iba el coche, destacando, únicamente, que Enaitz iba sin chaleco reflectante y casco". La madre añade a esto que "al conductor se le realizó el control de alcoholemia una hora y media después del accidente, e incluso entonces dio una tasa de 0,15 miligramos por litro de aire espirado".

En cuanto a la demanda del conductor, Tomás Delgado Bartolomé, de 43 años y vecino de Santo Domingo de la Calzada (La Rioja), la madre explica que éste "solicita el pago de los desperfectos de producidos en su coche por el atropello (valorados en 14.000 euros), así como otros 6.000 euros por el tiempo en que ha tenido que utilizar otro coche sustituto para trabajar".

FISCALÍA REABRE CASO

Precisamente, el fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de La Rioja, Juan Calparsoro, abrió ayer el caso de Enaitz, tras detectar la posibilidad de que el conductor incurriera en delito.

Tal y como explicó a Europa Press Calparsoro, la Fiscalía ha abierto "diligencias informativas" para "ver si existe la posibilidad de actuar contra el conductor" del vehículo que atropelló a Enaitz cuando éste volvía al camping con el que pasaba las vacaciones con sus padres en Castañares.

Calparsoro ha tomado esta decisión, indicó, después de ver las informaciones aparecidas en los medios de comunicación, a raíz de que el conductor haya presentado una demanda civil contra los padres exigiéndoles 20.000 euros en concepto del daño que sufrió su vehículo en el accidente.

El fiscal jefe se reunió, primero, con el Fiscal de Seguridad Vial y, entre los dos, decidieron "ver si existe la posibilidad de elevar el proceso civil a penal", ya que "hubo cosas que no se tuvieron en cuenta. Por la tarde se reunió con los padres de Enaitz.

Paralelamente, ayer se difundió una iniciativa por correo electrónico en la que se insta a los ciudadanos a acompañar a los padres de Enaitz Iriondo en el juicio de mañana, en Haro. Está previsto que ciudadanos de Durango y de Santo Domingo, entre otros municipios, acompañen a la familia.