Uruguay confía en la pronta solución del conflicto con Argentina por Botnia

Montevideo.-  Uruguay confía en una pronta solución del conflicto que le enfrenta a Argentina por la papelera del grupo finlandés Botnia, cuando se cumplen mañana cinco años del inicio de las protestas argentinas contra esa planta, que han causado más de 500 millones de dólares de pérdidas en este país.

En su segunda entrevista concedida en dos días, el presidente uruguayo, Tabaré Vázquez, manifestó anoche al canal de televisión VTV su confianza en que se pueda superar "este desencuentro con los hermanos argentinos por el conflicto por Botnia".

En concreto, Vázquez reiteró su esperanza en que la presidenta argentina, Cristina Fernández, "pueda hacer entender a los argentinos y que estos levanten los cortes de ruta" en los puentes internacionales que enlazan ambos países.

Ayer, en otra entrevista publicada por el semanario Búsqueda, Vázquez se refirió a ese mismo punto y señaló: "Yo confío en que la señora presidenta de Argentina va a lograr levantar el corte del puente Gualeguaychú-Fray Bentos".

Ese puente está cortado de forma permanente por ambientalistas argentinos desde el 20 de noviembre de 2006 en protesta contra la construcción de la planta de celulosa de Botnia, que comenzó ya a funcionar en diciembre de 2007.

El Gobierno de Buenos Aires respalda esas denuncias contra el posible efecto contaminador de la planta de celulosa en el río Uruguay que separa los dos países, y ha llevado el conflicto ante instancias judiciales internacionales.

Según las estimaciones del Gobierno uruguayo, ascienden a más de 500 millones de dólares las pérdidas sufridas en Uruguay por estos cortes, en concreto el bloqueo del puente que une la localidad argentina de Gualeguaychú y la uruguaya Fray Bentos, donde se alza la papelera de Botnia.

Los cortes intermitentes de otros dos puentes internacionales que enlazan los dos países han contribuido a esas pérdidas económicas, centradas en el transporte de bienes y el paso de turistas argentinos a Uruguay.

El ministro de Turismo y Deporte de Uruguay, Héctor Lescano, llegó a decir de forma un tanto exagerada que los bloqueos de las rutas por los activistas argentinos "son el 11 de septiembre uruguayo", en referencia a los atentados terroristas lanzados contra Estados Unidos en 2001.

A través del puente de San Martín, como se llama en realidad esa vía que enlaza Gualeguaychú y Fray Bentos, antes circulaba cerca del 70 por ciento de los turistas argentinos que entraban en Uruguay.

Las pérdidas económicas, que según otras fuentes empresariales podrían superar ya los 600 millones de dólares, afectan también a la hostelería y han puesto en un grave aprieto al normal suministro de las poblaciones cercanas al puente.

En Fray Bentos (23.000 habitantes) hay un importante balneario turístico, Las Cañas, que está sufriendo de manera destacada esos cortes.

El 29 de noviembre de 2006 Uruguay pidió ante el Tribunal Internacional de La Haya medidas cautelares contra los cortes de ruta realizados por los asambleístas de Gualeguaychú, denunciando a la par la pasividad del Gobierno argentino.

La postura de Uruguay ante ese foro judicial internacional es que tales cortes pretenden "asfixiar" la economía uruguaya.

Esa denuncia también ha sido realizada ante el Mercosur, organismo al que pertenecen los dos países, por el incumplimiento del Tratado de Asunción de formación del bloque en lo que se refiere a la falta de garantías para la libre circulación de bienes entre los territorios de los estados miembros.

El conflicto ha supuesto un incremento del apoyo de la población uruguaya a la construcción de nuevas papeleras en este país, lo que ha acelerado los trámites para la instalación de la española ENCE y está despejando el camino a la portuguesa Portucel.